Ese es el título de un excelente trabajo realizado por el economista y ahora codirector del Banco de la República, Adolfo Meisel Roca.
Voy a empezar por el principio, pero la idea es entregarles ese texto completo para que lo degusten y conozcamos lo que ha pasado con la región Caribe.
Y Adolfo Meisel sí sabe contar historias...
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1

EL LIDERAZGO Y EL FUTURO DEL CARIBE COLOMBIANO
Por Adolfo Meisel Roca
I. Introducción
Desde los inicios de la república, como lo han mostrado los historiadores, las relaciones entre la región Caribe y el resto de la nación colombiana han sido de tensiones y desencuentros.1 El clímax de esos conflictos se vivió en 1903, cuando uno de los tres departamentos costeños de la época, Panamá, declaró para siempre su independencia absoluta de Colombia.
Tal vez como nunca antes en este momento estamos viviendo una crisis del liderazgo político del Caribe colombiano en su capacidad para influir en los destinos de la nación. Esto es paradójico, pues en épocas recientes la participación electoral de la región ha resultado decisiva para definir el rumbo político del país.
La crisis del 
liderazgo político costeño se revela al ponderar la enorme distancia 
entre su peso electoral y su rol en la conducción del estado colombiano.
 En las elecciones presidenciales de 2014 la influencia de los ocho 
departamentos caribeños fue decisiva. Al dividir el país entre la región
 Caribe y el resto, se observa que Juan Manuel Santos perdió las 
elecciones en el resto del país, pero la victoria que obtuvo en la Costa
 Caribe fue tan enorme, que le permitió ser elegido presidente de la 
república por cuatro años más. 
 Sin embargo, es evidente que la región Caribe tiene serias dificultades para traducir su influencia electoral en control del estado colombiano: hay un déficit de liderazgo costeño en la dirección de Colombia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario