Esta es una buena noticia...
La economía colombiana sobrepasó las expectativas...
¡Qué bueno!
Gobierno, Anif y el Banco Mundial tenían esa percepción y confiaban en eso.
Otras entidades y organismos como Standard &
Poor’s, el Banco de la República o los analistas del mercado proyectaban
variaciones más modestas.
Nos quedamos con los primeros...
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Los sectores que movieron
al país fueron el agropecuario (4,9%), los servicios financieros (3,8%) y
los servicios sociales, comunales y personales (3,4%).
Noelia Cigüenza Riaño - nciguenza@larepublica.com.co
Ocho años después de que el país
viviera los efectos de la crisis financiera internacional, la economía
colombiana volvió a crecer por debajo de 2%, en un año marcado por la
lenta recuperación de los precios del petróleo y el impacto de la
Reforma Tributaria, que aumentó el IVA de 16% a 19%.
De acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de
Estadística (Dane), el año pasado el país se expandió 1,8%, 0,2 puntos
porcentuales menos que en 2016.
Este dato, en línea con la proyección que compartían el
Gobierno, Anif y el Banco Mundial, superó las expectativas de la
mayoría, pues el resto de entidades y organismos como Standard &
Poor’s, el Banco de la República o los analistas del mercado proyectaban
variaciones más modestas.
Si en 2009, cuando el desempeño de la economía fue de 1,7%,
el principal jalonador fue la rama de explotación de minas y canteras,
el año pasado los sectores que movieron al país fueron el agropecuario
(4,9%), los servicios financieros (3,8%) y los servicios sociales,
comunales y personales (3,4%).
“Aunque el crecimiento del café (-1,1%) y de la
silvicultura, extracción de madera y pesca fue negativo, con caídas de
1,7% y 3,7%, respectivamente, otros productos agrícolas crecieron 8,1% y
la actividad pecuaria 4,1%”, declaró el director del Dane, Mauricio
Perfetti.
Por su parte, el ministro de Agricultura y Desarrollo Rural,
Juan Guillermo Zuluaga, indicó que en 2017 el agro mostró que puede
impulsar la economía con una variación por encima de los otros sectores.
“Vamos a seguir trabajando para consolidar las buenas políticas del
gobierno del presidente Juan Manuel Santos, que es lo que ha logrado el
renacer del campo y que queda ratificado en las cifras”.
En total, cinco de las nueve ramas analizadas presentaron
alzas. Las más modestas fueron: comercio, reparación, restaurantes y
hoteles (1,2%), y suministro de agua, gas y electricidad (1,1%). Y los
sectores que terminaron el año en rojo fueron la explotación de minas y
canteras (-3,6%), la industria manufacturera (-1%), y la construcción
(-0,7%), explicado principalmente por la caída de 10,4% en la
construcción de edificaciones.
“Fue un año difícil, no solo para Colombia. Los grandes
países consumidores disminuyeron su demanda, los precios de muchos
productos primarios bajaron y los precios del petróleo solo empezaron a
mostrar recuperación al final del año. Sin embargo, logramos manejar las
condiciones adversas. Para 2018, las expectativas son mucho mejores,”,
aseguró María Lorena Gutiérrez, ministra de Comercio, Industria y
Turismo.
Agricultura
El agro y los alimentos tuvieron un buen 2017, ya que
ayudaron a mitigar el impacto negativo de otros sectores. En el PIB, fue
la actividad que más creció en 2017, con una variación de 4,9%.
Este crecimiento se da como reflejo de unas exportaciones
que aumentaron 7,2% en el año (la segunda mayor variación de 2017),
representadas en US$7.355 millones, sumado al hecho de que los alimentos
son el segundo sector en el comercio minorista.
Para el presidente de la Sociedad de Agricultores de
Colombia (SAC), Rafael Bedoya, a estos resultados hay que sumarle “el
programa Colombia Siembra, la recuperación de cultivos más resistentes y
el clima, además de una profundización en los canales de
comercialización del sector pecuario, en particular la avicultura y
porcicultura”. Algunos de los productos que tuvieron un mejor
comportamiento fueron la leche, el huevo y el ganado porcino.
Financiero
El sector de establecimientos financieros, seguros,
actividades inmobiliarias y servicios a las empresas tuvo un año estable
con cifras positivas en todos los trimestres . El sector fue uno de los
que presentó mejor comportamiento tras crecer en 3,8% respecto al año
anterior, lo que se explica por el crecimiento de los servicios de
intermediación financiera en 6,7%; actividades inmobiliarias y alquiler
de vivienda en 2,8%; y actividades empresariales y de alquiler en 2,4%.
Jonathan Malagón, vicepresidente de Asobancaria, señaló que “el sector
se ha mantenido durante los últimos años como una de las ramas
productivas más dinámicas, aun cuando se ha visto afectado por la
debilidad del consumo de los hogares y el moderado comportamiento de la
inversión”.
Sector minero
El sector minero completó su segundo año con crecimiento negativo,
aunque destacando el hecho de que el impacto fue menor en 2017, pues la
contracción fue solo de 0,4%, en contraste con el negativo de 6,5% de
2016. Aunque todos los subsectores tuvieron disminuciones, especialmente
el de extracción de minerales metalíferos (-16%), Santiago Ángel,
presidente de la Asociación colombiana de Minería opinó que “esta
disminución no necesariamente refleja una mala situación del sector
minero, sino por el contrario, recoge principalmente los mayores
esfuerzos por controlar la ilegalidad en la explotación de oro, dado que
la explotación de oro formal creció 8% en el año anterior”. El
petróleo, por su parte, logró mejorar frente a 2016, aunque siguió su
senda negativa, con una reducción de 3,9%.
Sector constructor
Durante 2017, la rama de la construcción disminuyó 0,7% respecto al año
anterior. Principalmente, esta caída se explicó por el descenso en la
construcción de edificaciones en 10,4%: la construcción de vivienda
registró una variación de -6,2% y en el desarrollo de proyectos no
residenciales la reducción fue de -16,2%. De acuerdo con Sandra Forero,
presidenta de Camacol, este resultado era previsible teniendo en cuenta
la menor velocidad en la comercialización de los proyectos de vivienda.
“Lo positivo es que durante el segundo semestre mejoraron las
condiciones necesarias para pensar en una recuperación en 2018. Tasas de
interés a la baja, menores niveles de inflación y recuperación gradual
de la confianza son señales muy positiva”.