"Cambiemos la meta, la Amazonia se respeta", "frenemos la deforestación" y "deforestación cero", fueron algunas de las arengas que profirieron los asistentes al plantón que se realizó en la Plaza de Bolívar de Bogotá. 

El intenso sol acompañó a los integrantes de organizaciones como Dejusticia, Greepeace, OpEPA, la Universidad de los Andes, Parques Nacionales Cómo Vamos y la Clínica Jurídica de Medio Ambiente y Salud Pública (MASP) de la Universidad de los Andes que convocaron a esta movilización
, al igual que a la radicación de una carta ante las secretarías del Senado y la Cámara de Representantes en la que se le solicitaban al Congreso interceder para que el gobierno nacional modificara la meta de deforestación planteada en el Plan Nacional de Desarrollo.
El documento iba respaldado con más de 90.000 firmas digitales que fueron recopiladas durante dos meses a través de la plataforma change.org. Se trata de ciudadanos que libremente se unieron a esta causa al considerar que el objetivo hasta ahora propuesto frente a la tala de árboles es inconveniente respecto a los compromisos nacionales e internacionales adquiridos por el país para reducir este flagelo. 
Para los promotores de esta actividad, con la meta actual el Gobierno no solo facilitaría que Colombia pueda perder una cantidad invaluable de bosque —casi cinco veces el tamaño de Bogotá— sino que también desconocería la sentencia 4360 de 2018, con la que la Corte Suprema de Justicia declaró a la Amazonia como sujeto de derechos y ordenó su protección inmediata, tras una tutela sobre cambio climático interpuesta por 25 niños y jóvenes. También iría en contravía de varias obligaciones internacionales que ha adquirido el país como, por ejemplo, el Acuerdo de París, en el que se comprometió a entregar todos sus esfuerzos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, algo imposible de cumplir, según estas organizaciones de la sociedad civil, si no se reduce la deforestación. 
Colombia, adicionalmente, firmó una Declaración Conjunta con Alemania, Noruega y el Reino Unido para reducir a cero la tasa de deforestación en la Amazonia colombiana para el año 2020
Varios actores decidieron unirse al plantón con el que se buscaba reducir la tasa de deforestación en el país. Foto: Mauricio Flórez/Semana. 
César Rodríguez Garavito, cofundador de Dejusticia y abogado de los 25 jóvenes de la tutela sobre cambio climático, indicó que para cumplir esos acuerdos era necesario sostener e incluso aumentar la meta contra la deforestación que existía en el anterior PND del expresidente Juan Manuel Santos, la cual planteaba alcanzar 90.000 hectáreas deforestadas al año. "En el nuevo plan que está en trámite en el Congreso el gobierno propone aumentarla a 220.000, es decir, relajar la meta y oficializar el incremeto de la deforestación, algo que no es lógico", apuntó.
El abogado cree que lo señalado en las últimas horas por el gobierno de reducir hasta en un 30% la tasa de deforestación durante el cuatrienio no es suficiente. "Una cosa es lo que dice la propuesta del Plan Nacional de Desarollo y otra lo que señala el Ministro de Ambiente. Hay que recordar que el plan tiene fuerza jurídica, es decir, el gobierno puede señalar que está permitiendo la deforestación de 220.000 hectáreas porque la ley se lo permite, de tal manera que las declaraciones del Ministro quedarían en meras expresiones de voluntad personal", dijo. 
Garavito se refiere al anunció que realizó este martes el ministro de Ambiente, Ricardo Lozano, quien señaló que para el 2020 el compromiso del gobierno era evitar la tendencia en un 20%. Según el Ideam la tasa de deforestación alcanzaría el próximo año las 315.000 hectáreas, lo que significa que se dejarían de talar 63.000 hectáreas. En otras palabras, en 2020 se deforestaría la misma cifra que en 2017, es decir, entre 220.000 y 250.000 hectáreas.
Para 2022, año en que termina el gobierno de Iván Duque, el Instituto proyectó que la cifra sería de 360.000 hectáreas devastadas. Frente a esto, lo informado por la cartera de Ambiente es que se reducirá y evitará la tendencia en un 30%, que representa 108.000 hectáreas. Entre sumas y restas, el promedio de deforestación anual en este cuatrenio será de 252.000 hectáreas.
"Eso es inaceptable", recalcó Garavito, quien señaló que ahora esperan que algún congresista o bancada plantee el tema en plenaria para modificar la meta del plan. 
Diego Leal, integrante del grupo de voluntarios de Greenpeace, manifestó que hay un hueco muy grande en el PND que permitiría que cerca de 1.000.000 de hectáreas de bosques se puedan deforestar en los próximos cuatro años. "Necesitamos que la deforestación sea un compromiso de lucha de este gobierno y del país. Este fenómeno es la principal causa que aporta Colombia al cambio climático y necesitamos que se implementen acciones y políticas concretas para luchar contra esete flagelo", manifestó. 
Jonatan Rodríguez, co-director en Colombia de Change.org, comentó que la presión ciudadana puede llegar a incidir positivamente, pues los tomadores de decisión no pueden desconocer la opinión de sus electores. "Cerca de 100.000 firmas es una cifra impresionante para un tipo de iniciativa como esta. Lo que se busca es que los gobernantes no le den la espalda a las solicitudes del pueblo. Estoy seguro que si la ciudadanía se sigue activando cada vez más, podemos hacer que el gobierno dé su brazo a torcer frente al reconocimiento de los derechos de la naturaleza", expresó.  
"La meta actual no busca reducir el número de hectáreas deforestadas, sino mantenerlo constante durante los próximos cuatro años", señalaron los peticionarios en la carta que fue enviada al Congreso, en la que se indicaba, además, que el gobierno nacional lo que estaba proponiendo era mantener una línea base en “crecimiento de la deforestación a nivel nacional respecto al año anterior”, es decir, de 23% y una meta para el cuatrienio de 0%.
"El 23% representa el aumento en el número de hectáreas deforestadas entre 2016 y 2017, cuando pasó de 178.597 a 219.973. Utilizar la tasa de crecimiento de las hectáreas deforestadas como indicador nos preocupa profundamente, pues significa que la meta se cumple siempre y cuando no aumente el número de hectáreas deforestadas, es decir, si se siguen deforestando 219.973 hectáreas anualmente. Si se analiza la información proporcionada por el Ideam, es claro que en 2017 este número alcanzó el punto más alto desde 2010. Por lo tanto, el indicador actual permite que durante el cuatrienio se pierda una cantidad exorbitante de bosque: hasta 879.892 hectáreas. Teniendo en cuenta que la deforestación es el principal motor de emisiones de gases efecto invernadero, es preocupante que la meta planteada permite que se continúe deforestando a velocidad desmesurada", señalaba el documento. 

A los organizadores de esta actividad les sigue preocupando que el presidente Duque y los congresistas no consideren sostener los compromisos adquiridos, ni propongan una nueva tasa de reducción de la deforestación y, por ese motivo, convocaron a los ciudadanos a expresar públicamente que quieren cero deforestación en el país por medio del hashtag #CambiemosLaMeta.
Esta es la propuesta para contrarrestar este flagelo que propone Dejusticia: