domingo, 8 de diciembre de 2013

La Paz en Colombia, por Ricardo Lequerica



Ricardo Lequerica es un empresario exitoso. Ha liderado procesos interesantes en la Región Caribe y también lo ha hecho en otros países. Ahora mismo su sede está en Estados Unidos, pero conectado con Colombia permanentemente.
Aquí nos regala un texto, donde llama la atención sobre el proceso de paz, que vale la pena registrar a nivel global, como lo hacemos ahora a través del RADAR.

Estoy seguro que ganaremos. Y que Colombia llegará a ser una nación libre. Libre de la Guerra…

Lequerica, dice que debemos aceptar el perdón…
Perdón, pero no olvido…

Y como dice él… guerra, corrupción, negocios de políticos y empresarios, que siempre quieren conseguir dividendos con la sangre de los pobres…

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La Paz en Colombia
Por Ricardo Lequerica

Hoy todos recuerdan y hablan de Mandela, ayer hablaban de Mahatma Gandhi pero, ¡¡solo por hablar!!

Se recuerdan los personajes como humanos pero no se recuerdan ni aplican su filosofía de vida... sus obras!

Para que haya paz en Colombia es necesario revisar minuciosamente las ejecutorias de ambos personajes y los pilares de su filosofía de vida, entonces convencernos de cuál es la mejor vía para alcanzarla.

Nadie puede devolver la historia, nadie puede devolver los muertos, nadie puede devolver los hechos violentos, es el pasado y es historia!!


¿Que debemos hacer?
La sicología humana trata siempre de aprovechar las oportunidades para sacarle ventajas, es nuestro caso, cada vez que se presentan soluciones aparece un político o un periodista con un comentario negativo que prepara negativamente la opinión pública, evitando que se logre avanzar.




Con el espíritu de revancha que habitualmente tenemos los colombianos, el mismo de los cangrejos, es muy difícil alcanzar la paz.
La vida física de los humanos es limitada en el tiempo, a los actores del conflicto les quedan menos de 50 años de vida, pero en la medida que este se prolongue el inicio de ese periodo se prolonga en el tiempo eternamente. Es necesario cortar de tajo el conflicto aunque sea entregando el perdón, sin vencedores ni vencidos.

Es necesario el perdón, más no el olvido!!
Nunca debemos olvidar la historia para evitar repetirla, pero el perdón es necesario para poder avanzar y terminar la horrible pesadilla que ya tiene más de un siglo.

El negocio de la Guerra intestina que hemos sostenido, no solo nos ha costado en vidas, también nos ha costado económicamente, desviando recursos que bien podrían ir dirigidos al progreso y bienestar de sus ciudadanos.
 
Que sucederia si empleamos bien los recursos destinados a la Guerra por todos los bandos. Seria que tendriamos mas inversion en infraestructura? Sería mejorada la Educacion? Sería mejorada la Salud? Tendriamos menos impuestos?

La Guerra es de gran interés para muchos politicos para poder aparecer como patriotas pero con la sangre de otros!

 
No he visto ningun hijo de politico (y menos de Presidentes) vestido de militar poniéndole el pecho al conflicto. Ellos dedican su tiempo a todo lo contrario... a succionar del sistema todo lo que puedan bajo el paraguas y con la anuencia de sus padres.

El conflicto es la mejor distracción para mantener la corrupcion y si no lo terminamos nunca tendremos tiempo para concentrarnos en ella y acabarla. 

No tengo datos precisos, pero podriamos afirmar que la corrupción nos cuesta más que la Guerra y también deja muchos muertos... en la miseria, el hambre y en el sistema de salud.
Es necesario que los medios se pronuncien al respecto identificando claramente a los enemigos de la Paz en Colombia y mostrando como ejemplo las ejecutorias del Maestro Gandhi y de su admirador Mandela.

Que la muerte de Mandela no quede solo en un evento social que sea olvidado con el próximo gol de la selección Colombia.

Cordialmente,


RICARDO A. LEQUERICA
lequerica@ieee.org

 

El comentario de 

JOSÉ LOPEIRA CARBONELL:

De acuerdo la película de horror de los 50 años vividos no se puede devolver, hay que perdonar, para que Colombia se pueda desarrollar, con más salud, educación, vivienda y tecnología, y no olvidar jamás la horrible noche de las  guerrillas, con sus desmanes, crímenes, violaciones, secuestros boleteos y etc.

Nuestro Presidente tiene el mérito de haber batallado por conseguir la Paz contra los intransigentes y los violentos adoradores de la guerra con sus sucios negocios alrededor de ella. Ojalá la consigamos