miércoles, 24 de febrero de 2016

Almendras amargas: habla Vicky Dávila por Daniel Coronell

Vicky Dávila se sienta un rato largo con Daniel Coronell a hablar de su renuncia, el episodio con la policía. Señala que considera que el presidente Juan Manuel Santos pidió su cabeza...
Confiesa que si le dieran la oportunidad editaría el video que provocó su salida.
Aclaró esto en este encuentro con Coronell:
"D.C.: Es fácil hacer la alineación después del partido, pero a muchos les pareció que el video solo probaba una relación homosexual consentida entre adultos y que su publicación fue una especie de ataque homofóbico.
V.D.: Eso no es así. Y me duele particularmente porque me esfuerzo por respetar las preferencias sexuales de las personas. Mire el video desde otra perspectiva y piense que fue grabado por una víctima tratando de mostrar el atropello al que fue sometida".

RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Daniel Coronell: Almendras amargas: Vicky Dávila habla de su salida de La FM

| 2016/02/20 00:00

Almendras amargas: habla Vicky Dávila


En entrevista exclusiva con Daniel Coronell, la reconocida periodista habla sobre el escándalo de la Policía, el video del ex viceministro del Interior y su salida de La F.m.
Daniel Coronell. Foto: John Caslon

DANIEL CORONELL: ¿Y usted por qué dice que su salida de RCN empezó cuando le regalaron unas almendras?

VICKY DÁVILA: La semana pasada los periodistas de La F.m. estábamos felices. La investigación por los actos de corrupción en la Policía Nacional había sido reconocida con el Premio CPB. Al día siguiente, el 10 de febrero, publicamos una investigación sobre las polémicas compras de la Casa de Nariño en donde, entre otras cosas, descubrimos que gastaron 15 millones de pesos en almendras. El mismo día de la publicación, la ministra de la Presidencia, María Lorena Gutiérrez, me envió con un alto directivo de la Organización Ardila Lülle el lujoso tarro de almendras con escudo de la Presidencia que ustedes pueden ver en estas fotos.

Las almendras traían un doble mensaje. Primero, que en Palacio, como es lógico, no había gustado la historia y, segundo, me estaban diciendo, elocuentemente, que estaban hablando con mis jefes sobre mi trabajo periodístico.
D.C.: Es curioso que la remitente de las almendras sea justamente María Lorena, quien fue designada como coordinadora de la comisión que evalúa a la Policía después de las denuncias de La F.m.
V.D.: Sí, eso es diciente. De paso se me quedó en el tintero un dato bueno. La doctora María Lorena ha sido socia de uno de los miembros de la comisión: Jorge Hernán Cárdenas, hermano del ministro de Hacienda y contratista de la Policía Nacional, es decir, beneficiario del general Palomino. La empresa que recibió los millonarios contratos de la Policía se llama "Oportunidad Estratégica" y uno de sus fundadores es la doctora María Lorena. (Ver acta de fundación) Ella vendió muy barata su participación el martes 10 de agosto de 2010 (Ver venta) y fue nombrada por decreto del presidente Santos al otro día, el miércoles 11 de agosto. (Ver decreto)

D.C.: ¿Y por qué no contó eso cuando dirigía La F.m.?
V.D.: Porque solo terminé la verificación un día después de mi salida de RCN.

D.C.: ¿Usted cree que el presidente Juan Manuel Santos pidió su cabeza?
V.D.: Sí, yo creo.
 
D.C.: Vicky, usted se acostumbró a cierta proximidad con el poder. Estuvo relativamente cerca de Andrés Pastrana. Más cerca de lo que yo hubiera preferido de Álvaro Uribe y cerca también de Juan Manuel Santos. Hoy, viéndolo en perspectiva, ¿cree que esa cercanía con el poder le sirve al ejercicio del periodismo?
V.D.: A ver, una cosa es la relación entre un periodista y una fuente de información y otra una amistad. La verdad, yo no he sido amiga de ninguno de los tres, mi grado de cercanía se limitó a lo profesional. Y en algún momento tuve que decir cosas que le molestaban al presidente de turno.

D.C.: Vicky, pero también dijo muchas que le gustaban al de turno. Sobre todo, cuando el de turno era Uribe…
V.D.: Lo dije, pero no para que le agradaran a él sino porque genuinamente a mí también me gustaban.
D.C.: ¿Y cuándo le dejaron de gustar las cosas de Santos?
V.D.: Tuvimos una relación buena y franca, entre periodista y fuente, hasta diciembre cuando denuncié las chuzadas y otras irregularidades en la Policía, que el presidente no quiso tomar en serio.
D.C.: ¿Entonces sí fue un tema personal como lo dicen muchos ahora?
V.D.: No, porque la crisis en la Policía le hace daño al país entero y las chuzadas son un pésimo síntoma para la democracia.
D.C.: Es verdad, pero debo decir que en el gobierno de Uribe la situación fue peor. Magistrados, opositores y periodistas fueron chuzados como ya está probado judicialmente.
V.D.: No sé si fue peor o no, pero sentí que durante Uribe se unieron muchas fuerzas para que se investigaran esas chuzadas. Lo cual no pasa ahora.
D.C.: Bueno, por lo menos los periodistas no nos podíamos quejar de que en el gobierno de Uribe no nos oyeran...
V.D.: (Risas) Y usted después dice que yo soy la del tema personal…
D.C.: Vicky, usted terminó desempleada por la publicación de un video que mostraba una conversación homosexual íntima de un senador y un oficial de la Policía. ¿Admite hoy que fue un error publicarlo?
V.D.: Si me pudiera devolver en el tiempo lo volvería a publicar, pero de otra manera. La forma terminó devorando el fondo. El video no se puede ver aisladamente sino como la prueba de las mentiras de uno de los involucrados denunciada por una víctima ya reconocida de la ‘Comunidad del Anillo’, la red de prostitución dentro de la Policía. El señor Ferro había negado, entre muchas cosas, que conocía al capitán con el que aparece grabado. El video por sí solo significa poco, pero en el contexto de las investigaciones va a ser una evidencia clave. No olvide que el procurador lo reconoció como una prueba en el mismo momento en que abrió la investigación a Palomino y lo envió a la Fiscalía.
D.C.: Usted dice que el error estuvo en la forma. ¿Entonces cuál sería la forma correcta de publicarlo?
V.D.: Definitivamente habría que editar el video y suprimir muchas partes del audio.
D.C.: Es fácil hacer la alineación después del partido, pero a muchos les pareció que el video solo probaba una relación homosexual consentida entre adultos y que su publicación fue una especie de ataque homofóbico.
V.D.: Eso no es así. Y me duele particularmente porque me esfuerzo por respetar las preferencias sexuales de las personas. Mire el video desde otra perspectiva y piense que fue grabado por una víctima tratando de mostrar el atropello al que fue sometida.

D.C.: Pero la víctima no parece tan víctima, canta, coquetea, incita y hace alarde de sus atributos…
V.D.: Justamente porque el video es solo un eslabón en la cadena. El capitán denunció que sus superiores en la Policía lo habían violado y sometido a la prostitución. Es decir, su testimonio ni empieza ni termina con el video. Hay numerosos indicios sobre los vejámenes que sufrieron él y otros miembros de la Policía. Como suele pasar en estos casos la cuerda se rompe por lo más delgado, los victimarios siguen tranquilos y el que puede terminar saliendo de la Policía es el denunciante.

D.C.: Hablando del doctor Ferro, ¿usted pensó en el dolor que podía sufrir la familia con la publicación?
V.D.: Aquí se está desdibujando la frontera entre víctima y victimario. No podemos olvidar quién ha sido Carlos Ferro y las acusaciones que pesan sobre él. Hace tiempo está publicada por Édgar Artunduaga la historia que lo vincula con un sórdido asesinato en Fusagasugá que incluye policías y relaciones homosexuales. Siento que la familia sufra, pero lo cierto es que sufre por las acciones del doctor Ferro y no por la publicación de las evidencias de esas acciones. También sufre la víctima que me entregó las pruebas entre lágrimas, esperando que algún día se haga justicia.
D.C.: Cuando usted decidió publicar el video, ya la Procuraduría había anunciado las investigaciones contra el general Palomino. ¿No le parece que con la publicación usted terminó saboteando su propio trabajo?
V.D.: Yo no, pero la lectura que se hizo del video sí. Sin embargo, las pruebas terminaron sacando a Palomino aun en contra de la voluntad del presidente Santos.

D.C.: Usted ha sufrido mucho en los últimos meses por esta investigación. ¿Quizás ese sufrimiento le nubló el criterio a la hora de decidir la publicación de este video?
V.D.: Es posible que los sentimientos me hayan jugado una mala pasada en la forma, pero lo volvería a publicar aunque editado.

D.C.: Vicky, ¿a usted no le pareció un poco ingrato el comunicado de la Organización Ardila Lülle?
V.D.: Daniel, para la Organización Ardila Lülle solo mi gratitud y mi cariño por siempre.
D.C.: ¿Cómo se han portado los colegas?
V.D.: Algunos muy bien. Otros cayeron en la trampa del episodio del video y olvidaron rápido todo lo que han descubierto las investigaciones del equipo de La F.m.
D.C.: ¿Qué ha sido lo más doloroso de todo esto?
V.D.: Separarme de mi equipo, ver manchado todo un trabajo serio por un episodio discutible y haber pasado a ser la mala de la película.

D.C.: ¿Por qué no se despidió al aire de su audiencia?
V.D.: (Se le quiebra la voz) Porque todo pasó tan rápido que no alcancé.
D.C.: ¿Qué planes tiene para el futuro?
V.D.: Soy una reportera. Nunca aprendí otro trabajo. Espero encontrar pronto un trabajo periodístico.
 

La mitad del recorte al presupuesto provendrá del ajuste a la inversión



El recorte decidido por el gobierno colombiano de $6 billones saldrá de un ajuste a la inversión…

RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1

La mitad del recorte al presupuesto provendrá del ajuste a la inversión

De los $6 billones que el Gobierno decidió recortar de su presupuesto para regular el déficit fiscal, la mitad corresponden a inversión, una cifra que representa 2% del Presupuesto General de la Nación, PGN, total para este año y que equivale a 0,7% del Producto Interno Bruto (PIB).

El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, explicó que de esta forma se reitera el compromiso con la meta de déficit fiscal de 3,6% del PIB para este año aun cuando los ingresos provenientes del petróleo permanecen bajos.
Luego indicó que la principal motivación de esta decisión es el cambio del escenario macroeconómico, especialmente desde que se aprobó el presupuesto el año pasado, pues los supuestos de los que se parte ya no son los mismos. “Estos cálculos tienen incidencia en rubros tanto del lado del gasto como de los ingresos”, dijo.
 
Sobre este particular se sabe que no solo hay un ajuste a la variación en la inflación (que se calcula cerrará el año en 5,5%), sino además una proyección inferior a la cotización promedio del barril de petróleo para lo corrido del año (el precio del Brent pasó de US$50 a US$35) y una caída en la producción de crudo apenas por encima de los 920.000 barriles diarios.

RADAR. 8683. Febrero 24-2016 –miércoles-



RADAR. 8683. Febrero 24-2016 –miércoles- 

TITULARES

La mitad del recorte al presupuesto provendrá del ajuste a la inversión

Gobernador del Atlántico, Eduardo Verano propone microcréditos para el sector agrario

Con 12 ferias, Fenalco busca reactivar comercio en el Atlántico

Umbrales de Endeudamiento Público y Privado
Anif – Comentario Económico del día 25 de febrero de 2015

UniAtlántico inicia pago de $11.200  millones en obligaciones de carácter judicial

Shakira y el Presidente Moreno del BID te invitan a participar en el 4º concurso ALAS-BID para la primera infancia

Cero IVA para tiquetes y planes turísticos hacia Colombia

Ingresos de los hoteles crecieron 8,4% en 2015, la cifra más alta en nueve años
"Si no se tiene cuidado con el gasto los impuestos serían demasiado altos", Miguel Urrutia, ex gerente del Banco de la República

Ecopetrol suscribió crédito con Bancolombia para financiar inversiones

Gobernación crea Plan Salgar para recuperar sector turístico de este corregimiento

Colombia suspende aranceles a importación de alimentos para combatir inflación

34.918 colombianos han viajado sin visa a Europa

Estas y otras noticias van a pasar por este RADAR de hoy.
AMPLIACIÓN:
Barranquilla y el Atlántico se promocionan en la Vitrina Turística de ANATO
 
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Director

El fin del periodismo por María Jimena Duzán

La importancia del periodismo.
El papel de los periodistas.
La dignidad de los comunicadores.
El  rol de los medios.
La corrupción que se apoderó de la profesión.
El rescate de la misma.
El poder las redes sociales.
Todo eso, lo podemos repensar leyendo a María Jimena Duzán, en esta columna de Semana.

RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
María Jimena Duzán: el fin del periodismo

| 2016/02/20 00:00

El fin del periodismo

No voy a defender la publicación del video. Lo que me interesa es la manera virulenta como aplastaron a Vicky Dávila en las redes sociales.
María Jimena Duzán Foto: Guillermo Torres

Ser periodista en Colombia hasta hace poco era un oficio aprestigiado, así no fuera ni bien pago, ni la mejor manera de hacer amigos. Sin embargo, de un tiempo para acá, esa aureola respetable con que la sociedad nos ungió en años pasados se nos ha ido evaporando en la medida en que la opinión pública, que no es boba, se ha dado cuenta de que el periodismo que se practica hoy en Colombia es sinónimo de soberbia, de likes, de arrogancia y de genuflexión ante los poderes económicos y políticos, y que valores como la independencia y la ética son parte ya de la prehistoria.

Ese repudio y hastío frente al papel que desempeñan los periodistas y los medios lo venía notando en las conferencias sobre periodismo a las que me invitan con alguna frecuencia, y en las que las críticas a los medios sobrepasaban incluso las críticas a la corrupción en los partidos políticos y en las instituciones gubernamentales. Me sorprendió también ver esa misma reacción en las víctimas de Bojayá que estuvieron en la ceremonia de reconciliación con las Farc. Para ellas, los medios son un enemigo tan temido como las Farc o los paramilitares. Luego de esa amarga experiencia tuve la impresión de que los medios teníamos que reflexionar seriamente sobre nuestro papel y sobre el periodismo que estábamos haciendo. Algo debíamos estar haciendo muy mal para que una comunidad como la de Bojayá hubiera prohibido la entrada de periodistas el día de la ceremonia de reconciliación por considerarnos un agente perturbador.

Sin embargo, fue con el linchamiento que se dio en las redes sociales contra Vicky Dávila, por haber sacado en La F.M. de RCN un video en el que se veía al exviceministro del Interior y a un policía en una conversación sexualmente explícita, que este malestar llegó a su cenit. Ese día en que se publicó el video, una señora me enrostró a mí la publicación, y me dijo que estaba hastiada porque los periodistas se creían dioses y jueces. No le pude decir nada, porque tenía razón. Por la noche, un taxi al que me subí me insultó cuando supo que era periodista. Tampoco pude decir algo en favor de los colegas.

No voy a defender la publicación del video de marras -no lo habría publicado por considerarlo innecesario para la investigación que estaba adelantando la periodista en torno a una red de prostitución que habría existido al interior de la Policía-, porque lo que me interesa para esta discusión es la manera virulenta como aplastaron a Vicky Dávila en las redes. La indignación fue tan tenaz que era evidente cómo a Vicky no solo le enrostraron su error, sino todos los excesos que los periodistas y los medios hemos cometido.
Yo atendería este clamor, así sea exagerado e injusto con la propia Vicky Dávila, quien por un error de criterio periodístico no merece ser lapidada en las redes. Y lo atendería porque hay en esa reacción un mensaje que la sociedad nos está mandando y que no deberíamos hacer a un lado con la soberbia que siempre nos caracteriza.
Hace rato el periodismo en Colombia perdió su dignidad porque se comenzó a ejercer con los mismos estándares éticos con que se hace política en el país. Hay periodistas corruptos que han convertido el periodismo en un negocio; trafican con la información y se aprovechan de su condición de periodistas para acceder a lugares con el propósito de engordar sus bolsillos, mover procesos o conseguir dádivas. Periodistas que además son intocables porque la Fiscalía ni los emplaza ni los investiga, como bien lo resaltó hace poco en una columna en El País de Cali, Gustavo Gómez. Hay columnistas que no declaran sus conflictos de intereses pero sí tienen el coraje de exigírselos a los políticos y a los ministros que denuncian. Y hay periodistas que se meten a tocar temas en los que sus novios o sus maridos son protagonistas sin decirle a la audiencia cuáles son sus relaciones con el poder, argumentando que se trata de su vida privada. Hay periodistas que trapean con los ministros, con los alcaldes, con los superintendentes con una soberbia propia de quien se cree de una casta superior. Y también hay periodistas que investigan no para descubrir la verdad de los escándalos sino para tumbar a funcionarios, a ministros o a presidentes y nutrir de esa forma su egoteca y su rating.
El periodismo es una herramienta fundamental para garantizar la libertad de expresión y es vital en una democracia. Ojalá que los periodistas aprendamos la lección de lo que sucedió con Vicky Dávila y volvamos a los fundamentos del periodismo. Todavía estamos a tiempo de enderezar el caminado y lo que menos necesitamos es que sea el presidente Santos quien nos dé clases de periodismo. Ahora, si persistimos en seguir acabando con el oficio terminaremos por finiquitarlo.

Cerdos. Por Paola Ochoa

El listado que nos ha presentado Paola Ochoa deberá ponernos a pensar...
¿Se equivocó Colombia y RCN por presionar a Vicky Dávila para que renunciara a su puesto?
¿Ese es el papel de la prensa?
¿Hay que narrar la historia a pesar de que sea tan cruel?
¿Y quién puede contar, si no es la prensa?

Todavía hay mucho que pensar, a raíz de estos hechos, que terminaron con la renuncia de la periodista colombiana.

Aquí en el RADAR lo que pensamos es que el mundo es ese: un desastre, una locura, una belleza, un placer, miles de alegrías, pero también muchas tristezas.
Vicky contó la historia...
 
RADAR,luisemilioradaconrado 
@radareconomico1
Paola Ochoa

Paola Ochoa

Cerdos

En ningún otro país del mundo habrían botado a Vicky Dávila.

Lo que le hicieron a Vicky Dávila es infame. En ningún otro país del mundo atacan a los medios cuando se publican fotos o videos de funcionarios, personajes públicos, situaciones o lugares. Por más pornográficos, obscenos, grotescos, morbosos, atroces, sanguinarios, despiadados y desalmados que sean. Siempre la prensa está en plena libertad de reproducir el material que le apetezca.

Hagamos una lista para refrescar la cabeza: desde la niña de 9 años que corría desnuda con ampollas en el cuerpo durante la Guerra de Vietnam, pasando por la foto del bebé de Siria que yacía muerto en una playa de Grecia, o hasta la propia Omaira, que agonizó durante 3 días seguidos en plena televisión nacional.
O qué tal las imágenes publicadas por la prensa de los hornos y cámaras de gas en Auschwitz, de los monjes budistas incendiándose en llamas en el sur de Vietnam, de la gente saltando desesperada de las Torres Gemelas, de los prisioneros de guerra iraquíes tratando de calmar a sus hijos en pleno cautiverio, o las fotos y videos de las torturas del ejército gringo en plena prisión de Guantánamo.

Sigamos ahora con los escándalos sexuales: las imágenes que publicó el diario español ‘El País’ sobre el bunga-bunga y la red de orgías de Silvio Berlusconi; las revelaciones en la prensa gringa de las grabaciones íntimas entre Mónica Lewinsky y Linda Tripp sobre los amoríos repetidos de Bill Clinton, o las fotos de la relación extramatrimonial del exdirector de la CIA David Petraus, que le costaron el puesto como cabeza del máximo organismo de inteligencia de Estados Unidos.

O qué tal los videos y fotos que publicó ‘The New York Times’ sobre el exgobernador de Nueva York Eliot Spitzer, teniendo sexo con una red de prostitutas rusas de lujo en la Gran Manzana; o el escándalo del senador de Idaho Larry Craig mientras trataba de tener sexo con otro hombre en un baño del aeropuerto internacional de Minneapolis. O las revelaciones que hizo la prensa de las aventuras homosexuales del exgobernador de Nueva Jersey James McGreeve, y su posterior confesión gay.

O el escándalo de ‘sexting’ del excongresista estadounidense Antony Weiner, cuyo contenido erótico también reveló ‘The New York Times’. O las fotos del exsenador John Edwards, quien mantuvo una relación extramarital mientras su esposa Elizabeth estaba gravemente enferma de cáncer. O la revelación de la prensa francesa sobre la aventura amorosa del presidente François Hollande, que le costó su matrimonio con la primera dama.

Hasta los medios paraguayos publicaron fotos de los hijos del expresidente y exobispo Fernando Lugo, sin importar los votos de abstinencia y celibato. La semana pasada –para no ir más lejos– la propia BBC reveló las cartas íntimas entre San Juan Pablo II y su entrañable amiga filósofa americana, de ascendencia polaca: “Te pertenezco” y “te siento en todas partes” eran algunos de los apartes.
En ninguno de esos países se linchó a los medios. En ninguno se les cuestionó por revelar los videos, las fotos, los e-mails, las cartas, los mensajes de texto. En ninguno se sancionó a los periodistas ni se les endilgó responsabilidad alguna por el sufrimiento de las familias. La responsabilidad siempre es exclusiva de los protagonistas de los escándalos, que ‘motu proprio’ ellos mismos se buscaron.
Cerdos
Ilustración: Juan Felipe Sanmiguel
En ninguno de esos países se cuestionó la integridad de un medio por revelar la intimidad de los protagonistas. En ninguno se dijo que era un asunto reservado entre dos personas, que solo querían tener sexo. Y la razón es sencilla: se trata de figuras públicas y de altos funcionarios del Estado, de cuyo carácter y criterio depende el destino de todo un pueblo.
 
Ese es –y ha sido– el papel de la prensa: publicar imágenes bestiales, salvajes, brutales, dolorosas, crueles, violentas, salvajes, carniceras y hasta perversas. Imágenes que despierten al mundo del letargo y la ignorancia en la que a veces dormita. Imágenes que duelen en el alma, porque tocan las fibras de lo que la humanidad niega, pero también reclama: verdad. Hechos y no palabras.

Usted, Vicky, es una periodista de verdad, con una mentalidad de reportera del primer mundo. Lástima que le haya tocado nacer y trabajar en Colombia, el único país en el planeta en el que se castiga la verdadera libertad de prensa. El único donde sus líderes siguen defendiendo esa caduca tradición de machos que, a través de hacer porquerías juntos, garantizan roscas de favores recíprocos por poder y privilegios.

PAOLA OCHOA
@PaolaOchoaAmaya