Retornar a lo sencillo. Por Luis Eduardo Blanco Camacho

Volver a lo sencillo.
Esa es la invitación de Luis Eduardo Blanco.
Son muchos los trámites que evitan aprovechar los Tratados de Libre Comercio que Colombia ha suscrito con otros países. 
A veces, nos enredamos.Y los negocios se complican.
Vamos a leer Luis Eduardo.

RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1

Retornar a lo sencillo 

Por Luis Eduardo Blanco Camacho

Gerente Regional Caribe de ANALDEX

El próximo 18 de Diciembre de 2015 será el  plazo indicado en los Decretos 1289, 1292 y 1300 de 2015 para el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de recibir nuevamente la operatividad de los Sistemas Especiales de Importación y Exportación, Zonas Francas, Sociedades de Comercialización Internacional, Zonas Especiales Económicas de Exportación y demás instrumentos que promueven el comercio exterior.

El tiempo ha dado la razón a los Empresarios quienes de manera permanente encontraron que los tiempos para las figuras de “facilitación” se fueron convirtiendo en obstáculos cuando se decidió pasar hace más de cinco años esa función a una entidad que su misión es “controlar” y no “facilitar”.

En el tema específico de zonas francas, poco o casi nada la figura siguió su proceso de incrementar en  números; incluso, aparecieron en el camino pocos amigos de la facilitación, por lo cual no se avanzó y terminamos en cifras muy similares a las que se dejaron hace cinco o más años; es decir, 40 Zonas Francas Permanentes y 62 Permanentes Especiales. Con el detrimento de la desaparición de las Uni-Empresariales o Especiales, que no les fue permitido por vía Ley, continuar con sus propuestas.

En este punto lo que invita al análisis es considerar si el mecanismo en otros Países incrementaba su presencia para competir en los mercados internacionales. Y otro aspecto a revisar es, la ubicación estratégica de las nuevas Zonas Francas en Colombia, a pesar del conocimiento en los costos de fletes que están asumiendo por el traslado de las mercancías a los puertos que los Empresarios Colombianos al encontrarse ubicados en el  interior del País, conocido como “Costo-Colombia”.

Las cifras no mienten y seguimos embotellando Empresas y Zonas Francas al interior del País a pesar de reconocer que en la ubicación nos permite mejora competitividad para enfrentar los mercados internacionales, si es que queremos aprovechar los Tratados de Libre Comercio, y si a eso le sumamos la tramitologías, revisiones de Entidades de Control, conceptos, normas, sellos, no aprovechamiento del internet para agilizar trámites, y en general  obstáculos propios de los Colombianos,  quedamos en desventaja frente a otros Países en los procesos de internacionalización.

Por lo anterior, la propuesta de retomar las operaciones de “facilitación” del Comercio Internacional por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo lo recibimos con beneplácito, tal vez porque siempre entendimos que nunca debieron salir de allí.

Sencillo: una cosa es el “control”  y otra es lo “comercial”. Sin embargo debemos estar atentos, en razón a que las expectativas para crecer económicamente en cualquier país obedecen, fundamentalmente, a su fuerza productiva, activada por Industrias y recurso humano,  a quienes también hay que apoyar por parte de las autoridades a fin de sortear la competencia. Con ello, me refiero a ser controladores de las operaciones formales e informales, pero dinamizadores con organización para facilitar con rapidez las oportunidades comerciales que se presentan, porque los países, como los empresarios y las personas, todos tenemos nuestro “cuarto de hora” y hay que aprovecharlo “justo” en el momento requerido.