miércoles, 29 de octubre de 2014

Ajustes institucionales Por Jairo Parada

¿La Constitución colombiana es respetada?
¿La respetamos los colombianos?

Es una buena pregunta que requiere respuestas…

Leamos a Jairo Parada, cuando habla de ajustes institucionales.

RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1



Ajustes institucionales
Por Jairo Parada
Una constitución, según los institucionalistas americanos, define las reglas de juego formales básicas de una sociedad. Su reforma no es asunto baladí. En el fondo, la Constitución y las leyes que las Cortes hacen cumplir definen los valores de una sociedad. Por lo anterior, el foro realizado el pasado viernes sobre la Justicia en Colombia fue muy importante. Sin embargo, la asistencia masiva de funcionarios judiciales y la ausencia de la sociedad civil fue evidente. En realidad, fue convertido, en la mañana, en una batería de aplausos a los miembros del Consejo Superior de la Judicatura (CSJ) por parte de  muchos empleados judiciales, para presentar la reforma que cursa en el Congreso como un “ataque” a la justicia.
 No me dejó una buena impresión que el actual presidente del Consejo –removido por el Consejo de Estado– y pegado al cargo con apelaciones, apareciera como el adalid del sector, después de haber hecho uso del “yo te elijo, tú me eliges” en su tránsito múltiple por varias cortes.
El Gobierno desarmó la discusión con una exposición sólida del ministro Néstor Humberto Martínez, aclarando que la reforma actual ni es una reforma de la justicia ni es una reforma electoral. Se trata solo de ajustes urgentes a la arquitectura constitucional debido a la ruptura que se ha creado con el famoso articulito que instituyó la reelección, y graves situaciones que ocurren en la esfera política. La verdad, es que nadie pretende que dicha reforma resuelva los grandes problemas de la justicia, como alegaron muchos magistrados. Pero, que se necesitan ajustes inmediatos, es un argumento válido. La discusión se debe plantear en la esencia de los asuntos. 
Sin duda, el tema de la representación senatorial de los departamentos excluidos es clave. Así como la necesidad de establecer las listas por partidos y liquidar el voto preferente. Los partidos son organizaciones que operan como correas de transmisión entre la estructura de clases de una sociedad y el poder político del Estado. Ya es hora de que los colombianos entendamos que hay que votar por partidos y no por fulano o mengano. 
Asimismo, si no nos gustan los actuales partidos, podemos crear otros, pero que sean de peso para que pasen el umbral. Nada de microempresas electorales. Igual de importante es el tema del Tribunal de Aforados. La actual Comisión de Acusaciones de la Cámara se volvió de “absoluciones”, debe eliminarse pero remplazarse por algo distinto que tenga dientes. Nadie puede estar por fuera de la ley
Para el ciudadano común y corriente, la justicia del país no va bien, se ha ido desacreditando. Solo un 17% de los ciudadanos cree en las Cortes, y de la valiente Corte que se enfrentó al uribismo, poco queda, siendo remplazada por epígonos del conservatismo y el procurador. Es una lástima, pues el país está lleno de magistrados y jueces valientes, pero casi nunca llegan a estos altos cargos. El CSJ tiene muy poco que mostrar. Los ajustes se necesitan ya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario