Es bueno saber que es el EBITDA.
El EBITDA es uno de los indicadores financieros más conocidos e imprescindible en cualquier análisis fundamental de una empresa.
Sus siglas
representan, en inglés, las ganancias antes de intereses, impuestos,
depreciación y amortización (Earnings Before Interest, Taxes, Depreciation,
and Amortization), o lo que es lo mismo, representa el beneficio bruto
de explotación calculado antes de la deducibilidad de los gastos financieros.
Se ha vuelto muy conocido y más popular en estos tiempos.
@radareconomico1
¿Qué es el EBITDA de una empresa y cómo se calcula?
El EBITDA es uno de los indicadores financieros más conocidos, e imprescindible en cualquier análisis fundamental de una empresa. Sus siglas representan, en inglés, las ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (Earnings Before Interest, Taxes, Depreciation, and Amortization), o lo que es lo mismo, representa el beneficio bruto de explotación calculado antes de la deducibilidad de los gastos financieros.
El EBITDA, aunque no forma parte del
estado de resultados de una compañía, está muy relacionado con él. Constituye un indicador aproximado
de la capacidad de una empresa para generar beneficios considerando
únicamente su actividad productiva, eliminando de esta manera, la subjetividad
de las dotaciones, el efecto del endeudamiento o la variabilidad o arbitrio del
legislador de turno en materia impositiva.
El EBITDA se calcula a partir del resultado final de explotación de la empresa, sin incorporar los gastos por intereses e impuestos, ni las disminuciones de valor por amortizaciones o depreciaciones, con el objetivo último de mostrar el resultado puro de explotación de la empresa. Por este motivo, los elementos financieros (intereses de la deuda), tributarios (impuestos), cambios de valor del inmovilizado (depreciaciones) y de recuperación de la inversión (amortizaciones) deben quedar fuera de este indicador.
La importancia del EBITDA radica
en la sencillez de su cálculo, aunque conviene hacer varias aclaraciones que
pueden llevar a una mala interpretación del mismo:
- El objetivo del EBITDA no es el de medir
la liquidez generada por la empresa, ya que aunque este indicador deduce
de su cálculo las provisiones y amortizaciones, no incluye otras salidas
de tesorería como los pagos financieros tanto por intereses como por la
devolución del principal de los préstamos o las ventas y compras que aún
no se han hecho efectivas.
- Al eliminar las amortizaciones
productivas no tiene en cuenta las inversiones productivas realizadas
ni en el pasado ni en el período actual.
- Al no considerar el endeudamiento de la
empresa, es posible un elevado EBITDA sea consecuencia de un elevado
grado de apalancamiento, por lo que la capacidad real de obtener beneficio
puede verse reducida de forma considerable.
Por tanto, un EBITDA elevado no es
necesariamente sinónimo de una buena gestión empresarial, sino de un elevado
endeudamiento o de otros factores que condicionan este cálculo. Cabe
considerar otros aspectos de forma conjunta en el análisis de una empresa.
Por esta razón, es habitual utilizarlo en relación o cociente a otros parámetros como la inversión realizada, las ventas efectuadas o el endeudamiento contraído en un período de tiempo determinado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario