sábado, 4 de junio de 2022

¿Son viables las propuestas económicas de Gustavo Petro y Rodolfo Hernández?

¿Qué dice el Centro de Estudios Económicos Anif (Asociación Nacional de Instituciones Financieras) en torno a los candidatos a la presidencia en torno a la economía colombiana? 

Anif hizo tres llamados sobre las propuestas económicas de los candidatos…

®rada®luisemilioradaconrado

@radareconomico1

https://radareconomicointernacional.blogspot.com/

¿Son viables las propuestas económicas de Gustavo Petro y Rodolfo Hernández?

La Anif repasó los planteamientos de los candidatos para determinar falencias y hallar posibilidades.

El Centro de Estudios Económicos Anif (Asociación Nacional de Instituciones Financieras) hace tres llamados sobre las propuestas económicas de los candidatos a la Presidencia.

Primero: se debe prestar atención a la sostenibilidad de las cuentas nacionales; segundo: la base de contribuyentes debe aumentar para incrementar los ingresos tributarios; tercero: se debe revisar al gasto público, pues la solidez de las finanzas del Estado no está solo en una reforma a los tributos.

Los expertos –tras revisar los programas y propuestas de Gustavo Petro y Rodolfo Hernández– apuntan a que el país debe incrementar los ingresos tributarios en la próxima década en al menos cinco puntos del Producto Interno Bruto (PIB). 

Esa necesidad ha sido una constante en el contexto de un déficit fiscal cercano a 7,1% del PIB y en el que el Estado gasta más de lo que recauda a través de los gravámenes a los contribuyentes. Esos impuestos son la base de la financiación de los programas públicos.

Así es que, si en algo coinciden los expertos en economía, es que el próximo presidente tendrá que hacer una nueva reforma tributaria. Esto a pesar de las implicaciones sociales que han dejado los intentos anteriores de incrementar el recaudo.

Si bien Petro y Hernández han delineado las políticas que implementarían, el paso a paso del cómo lo harían aún está pendiente.

Cambios en IVA no deben ser acelerados 

Tanto Gustavo Petro como Rodolfo Hernández trazaron en sus programas de gobierno y en declaraciones públicas ideales que hablan de una modificación en la forma –y las proporciones– en las que el Estado está recaudando las contribuciones en IVA y en renta.

Dos ejemplos que dan cuenta del cambio en materia de impuestos que llegaría para Colombia: Petro ha mencionado que los inversionistas deberán pagar impuestos sobre los dividendos y Hernández traza la posibilidad de reducir el IVA del 19% al 10%.

Hay una lógica que permea esas posibles renovaciones: un Estado que aporta más fondos a las comunidades vulnerables requiere recaudar más, independientemente de a qué actor esté gravando, así que las promesas paternalistas necesitan que las instituciones se pongan a hacer cuentas.

“Se han dado puntadas sobre lo que propone cada candidato en temas tributarios, pero no se ha trazado una hoja de ruta que resuelva este problema de forma estructural”, dice Anwar Rodríguez, vicepresidente de Anif.

Los comentarios de esa institución a las propuestas de los candidatos dejan un jalón de orejas: el problema fiscal de Colombia no se zanja solo con mecanismos contra la corrupción porque el déficit es grande y necesita, textualmente, de reformas serias en IVA y renta para garantizar la sostenibilidad de las cuentas nacionales. 

Ahí aparecen propuestas como la del candidato Rodolfo Hernández de reducir el IVA al 10%. En este punto hay una nota al pie: si bien Hernández bajaría el IVA, subiría el Impuesto de Industria y Comercio (ICA), lo que podría generar un incremento en los costos que percibe el consumidor final, como lo detalla Luis Carlos Reyes, director del Observatorio Fiscal.

Sobre este tema, la entidad dijo –sin referirse directamente al ingeniero– que la tarifa del IVA podrá reducirse paulatinamente solo cuando el complejo sistema de exenciones dé soluciones y se garantice la devolución del impuesto a los hogares de menores ingresos.

Otra cuestión en la agenda del exalcalde de Bucaramanga es retirar el 4x1.000. Este es un gravamen a movimientos financieros que se implementó en 1998, supuestamente de forma temporal, pero que terminó prologándose en el tiempo.

Pero el Centro de Estudios considera que este representa un ingreso tributario permanente para las cuentas fiscales, por lo que llama la atención sobre que su eliminación sería viable solo si se sustituye con otra fuente de ingresos.

Más contribuyentes y más recaudo

Como lo detalló el Centro de estudios Económicos Anif, las decisiones del próximo presidente en materia fiscal, pensional y laboral son fundamentales para el funcionamiento de la economía. Hay otro factor que suscita el interés de los economistas: la sostenibilidad de las cuentas nacionales.

Empero, esa brecha tiene implicaciones porque el Estado tiene que empezar a pagar sus deudas y equilibrar sus finanzas en algún momento para atajar, con prontitud, las implicaciones del vacío económico. De ahí que seguir recaudando dinero sea una tarea imparajitable para el sector público.

La Anif apunta que la cantidad de personas naturales –es decir, que no son empresas– que contribuyen con los gravámenes debe incrementarse, así como ve necesario eliminar las exenciones para quienes tienen mayores ingresos.

Las exenciones tributarias le costaron al país 8,9% del PIB en 2019 y esa participación se incrementa año tras año, al tiempo que el Estado deja de percibir ingresos que podrían ser importantes para contrarrestar el déficit fiscal que terminó en 7,1% del PIB en 2021 y que el Ministerio de Hacienda espera que cierre en 6,2% en 2022.

Más subsidios requieren de más gasto

En la agenda del candidato Gustavo Petro están planteamientos como que el Estado apoye la cotización al sistema de pensión de las personas que trabajan en labores del cuidado –sobre todo las mujeres– buscando que completen las semanas para obtener pensión; además del planteamiento de que el Estado sea el empleador primario para quienes no tienen trabajo.

Al preguntarle a Anwar Rodríguez sobre estos y otros programas que hablan de garantizar esos ingresos, el vicepresidente llama la atención sobre que “cualquier programa social que genere un gasto público debe estar financiado por un ingreso de la nación que viene de los impuestos”. En otros términos: plantear ingresos garantizados viene de un gasto para el Estado.

Si algo queda claro al revisar las alocuciones en medios de comunicación y los programas de gobierno de los aspirantes a la Presidencia que quedan en la contienda final es que los tributos que se pagan en Colombia se modificarán en los próximos cuatro años. Pero, en el fondo, queda una pregunta: ¿Dónde está la minucia sobre las reformas tributarias y la reducción del gasto?

No hay comentarios:

Publicar un comentario