500 AÑOS DE GLOBALIZACIÓN. Por Ricardo Plata Cepeda

La historia… los casi 500.

Esperemos poder allí.

Columna de Ricardo Plata Cepeda:

Faltando 10 años para el onomástico 500 de la mayor gesta marinera de la historia, que el mundo y en especial españoles y portugueses celebran esta semana, escribí esta columna con un “490” en el título, por la íntima duda de si podría llegar a escribirla hoy.

Agradezco a la vida y a EL HERALDO su repetición.

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500 AÑOS DE GLOBALIZACIÓN

Copérnico, contemporáneo de Elcano, demostró que la Tierra giraba alrededor del Sol y no viceversa, con todas sus implicaciones. Quienes pretenden oponerse hoy a la globalización se asemejan a quienes se opusieron entonces al sitio que ocupa el Sol, con el agravante de tratar de hacerlo con cinco siglos de retraso. 

Por Ricardo Plata Cepeda

Un 9 de septiembre, hace 500 años, atracó en el puerto de Sanlúcar de Barrameda Juan Sebastián Elcano, el primer navegante en darle la vuelta al mundo, zanjando de una vez por todas la discusión sobre su redondez. Había zarpado tres años antes de Sevilla, en la expedición al mando del portugués Fernando de Magallanes, con 5 navíos y 234 hombres. Elcano regresó con 18 hombres exhaustos y una sola embarcación, La Victoria. Las otras y los otros no tuvieron la misma suerte. En la azarosa travesía, La Santiago se perdió, La San Antonio desertó, La Concepción se incendió, La Trinidad naufragó y Magallanes pereció.

El rey Carlos I de España al recibir a Elcano en Valladolid le entregó un globo terrestre con la frase “Primus circumdedisti me”: “El primero en darme la vuelta”. La era de la globalización había comenzado… para siempre. El intercambio comercial estuvo presente desde su nacimiento. La Victoria venía cargada de especias: el motivo de Colón para buscar un camino más corto a las Indias por el Occidente, bajo la arriesgada conjetura de que La Tierra era redonda.

La caída de Constantinopla a manos de los turcos en 1453 había obstaculizado el comercio de Europa con Asia y las potencias marítimas de entonces, España y Portugal, luchaban por nuevas rutas. Los portugueses dominaron la del Oriente, los españoles establecieron la de México a Filipinas. El proceso se fortaleció con la apertura, en 1869, del canal de Suez, que evitaba tener que dar la vuelta al África, y con la del canal de Panamá, en 1914, que ahorraba circunnavegar a Suramérica. En el último siglo, la navegación aérea, las telecomunicaciones y la web terminaron por convertir en realidad la idea de una aldea global. Globalización viene de globo.

Sin embargo, ha surgido un heterogéneo movimiento, que incluye periodistas, políticos, pensadores y presidentes “opuestos” a la globalización, endilgándole a ésta la causa de una larga lista de males del mundo actual: desigualdad, guerras, pobreza, cambio climático, explotación, desplazados, etc. No es para nada claro cómo se hubiera aliviado, y menos aún evitado, alguno de esos problemas si La Tierra fuera plana.

Copérnico, contemporáneo de Elcano, demostró que la Tierra giraba alrededor del Sol y no viceversa, con todas sus implicaciones. Quienes pretenden oponerse hoy a la globalización se asemejan a quienes se opusieron entonces al sitio que ocupa el Sol, con el agravante de tratar de hacerlo con cinco siglos de retraso. Celebremos, más bien, el olvidado onomástico de la odisea sin igual de Elcano, el gran timonel de la globalización. Gracias a ella accedemos a lo mejor de la tecnología, la gastronomía, la ciencia y la cultura.

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