miércoles, 9 de septiembre de 2020

La situación del carbón en el país: en problemas serios, Por Ricardo Ávila

Con Ricardo Ávila hemos tenido la oportunidad de compartir en Barranquilla, Colombia y el mundo.

Nos encontramos muchas veces en las Asambleas del Fondo Monetario Internacional y en el Banco Mundial.

Siempre ha sido diálogos valiosos porque siempre revisamos la situación d Colombia y del mundo económico.

Ricardo es un estudioso ciudadano que analiza muy bien el panorama nacional e internacional.

Vamos a leerlo...

RADAR,luisemilioradaconrado

@radareconomico1

La situación del carbón en el país: en problemas serios

Bajos precios y dificultades regulatorias tienen a este sector de la minería en dificultades.

Cerrejón

En 2020, la producción de carbón en el país estaría por debajo de las 60 millones de toneladas.

Foto: 

Archivo / EL TIEMPO

Las máquinas se apagaron al filo de las tres de la tarde. Casi al unísono las gigantescas grúas dejaron de extraer mineral de los tajos, las enormes volquetas se detuvieron y los trenes que recorren 150 kilómetros de carrilera hasta llegar al puerto apagaron sus motores. En cuestión de minutos, el silencio se extendió en las instalaciones en las que laboran unas diez mil personas diariamente, entre empleados directos y contratistas.

Así comenzó el lunes pasado la huelga en el Cerrejón, al sur de La Guajira, en donde está ubicada la mina de carbón a cielo abierto más grande de América Latina. A pesar de los llamados en pro de no suspender las operaciones, la determinación de los afiliados al sindicato de Sintracarbón fue la de detener sus labores tras haber agotado las etapas previas de negociación sin haber llegado a un acuerdo con la administración de la empresa.

No hay duda respecto al daño que dejará la parálisis. El cálculo es que las pérdidas para el departamento y el país ascienden a unos 7.000 millones de pesos al día, mientras que en lo que atañe a la compañía, su realidad financiera será peor, tras registrar un saldo en rojo por 368.000 millones de pesos al cierre del primer semestre.




En medio de las difíciles circunstancias por las que atraviesan el país y la región, lo ocurrido califica como una mala noticia. Basta recordar que en Riohacha la tasa de desempleo asciende al 27,5 por ciento o que en los meses desde cuando comenzó la pandemia, se habían distribuido 20 millones de litros de agua a las comunidades de la zona por parte de la firma.



Ahora es probable que la desocupación suba más y que la calidad de vida de miles de personas empeore, sobre todo si no hay un arreglo pronto. Muchos en la zona recuerdan el impacto de la huelga de hace siete años, que duró 32 días y cuyas secuelas aún se sienten.



La mala hora

Pero más allá de si una solución se encuentra rápido o no, el caso pone de presente la profunda crisis que golpea al sector. A la fecha, tres de las cuatro minas más grandes del país no están operando pues, aparte del Cerrejón, también están paralizadas las labores en las instalaciones de Prodeco y CNR, ubicadas en el Cesar. Tan solo Drummond sigue adelante, no sin enfrentar desafíos.



Las cifras son elocuentes. Hace tres años, cuando se extrajeron 90 millones de toneladas, se llegó a considerar factible alcanzar los 100 millones de toneladas en un lapso relativamente corto.



Sin embargo, la meta no solo no se alcanzó, sino que en 2020 la producción estaría por debajo de los 60 millones de toneladas, 20 millones menos que en el calendario previo. Mal contada, esa disminución equivale a unos 800 millones de dólares, si se toman como base las cotizaciones actuales.



Es verdad que algunos imprevistos influyen en ese cálculo. Por cuenta de las cuarentenas, las puertas de los diferentes frentes de trabajo se cerraron, al menos, durante tres semanas. Una vez retornaron las autorizaciones para volver a comenzar, en varias poblaciones los alcaldes y la ciudadanía en general expresaron su preocupación ante la posibilidad de que aumentaran las cifras de contagio del covid-19. Debido a ello, la normalización tardó más que lo esperado.



De otro lado, la temporada invernal que se siente con fuerza en el norte del territorio nacional golpea la productividad en las áreas donde se labora, pues el agua se empoza y hace más difíciles las condiciones de tránsito en las vías de acceso. Ahora que el Ideam pronostica que las precipitaciones superarán con creces el promedio, los obstáculos serían todavía mayores.


Tenemos la posibilidad de adaptarnos a los cambios que ya sucedieron junto con los que vienen y seguir vigentes, pero eso exige que jalemos para el mismo lado 

Tales factores se suman al descenso en los precios internacionales del mineral que, en el caso del que se utiliza para las plantas térmicas que generan energía, han bajado 58 por ciento a lo largo de los pasados dos años. Para decirlo en plata blanca, el valor de la tonelada puesta en un puerto de Colombia pasó de 91 a menos de 35 dólares en ese lapso.



A lo anterior hay que agregarle elementos adicionales. Las decisiones tomadas por diferentes tribunales han aumentado costos y limitado oportunidades de expansión, como lo ilustran un par de casos.



Una demanda interpuesta por representantes de la etnia yukpa, que habita a ambos lados de la serranía del Perijá, derivó en una sentencia que impide disponer del material estéril en el área usada por Prodeco, con lo cual hay que transportarlo mucho más lejos. Y en lo que corresponde al Cerrejón, no se ha podido explotar una parte del yacimiento, al tiempo que se hacen exigencias sobre la calidad del aire que están muy por encima de lo que establecen las normas nacionales.



(Le recomendamos leer: La baja en tasas de interés no toca aún los créditos hipotecarios)



Como si lo anterior no fuera suficiente, el proceso de consulta previa hace más compleja la obtención de permisos. Y el Gobierno tampoco se caracteriza por moverse con rapidez.



Por ejemplo, hay una discusión respecto a la forma en que se liquidan las regalías que, según voceros del ramo, desemboca en que se pague al menos 1,3 dólares de más por tonelada. Aunque una solución vendría en camino, todavía no aparece.



Un giro necesario

Ante semejante cadena de infortunios suenan voces que señalan que, en cualquier caso, la suerte de la actividad está echada. Según esa visión, el mundo está en proceso de dejar atrás los combustibles fósiles, con lo cual es cuestión de tiempo antes de que el consumo del mineral desaparezca.



La realidad es otra. Si bien el carbón va a disminuir su peso dentro de la canasta de generación energética, las proyecciones señalan que dentro de un par de décadas todavía tendrá una participación del 25 por ciento dentro de la producción de electricidad a nivel global.



Es verdad que en algunas regiones el consumo viene cayendo. En Europa existe el plan de pasarse a fuentes renovables, aunque el cronograma de desmontar las plantas térmicas existentes se movió hasta 2038. En Estados Unidos, las circunstancias cambiaron, pues gracias al polémico fracking aumentó la oferta de gas y se hicieron reconversiones para usar ese combustible.



(Además: Encuesta de Banrepública prevé un alza salarial de 3,6 % en el 2021)



No obstante, en Asia el apetito por el mineral no ha disminuido. China, India, Indonesia, Vietnam o Filipinas están en proceso de construir nuevas centrales termoeléctricas. Japón, por su parte, planea desarrollar más de 20 proyectos del mismo tenor.



El año pasado, las regalías atribuibles a las explotaciones carboníferas fueron de 2,2 billones de pesos, que, a su vez, representan el 89 por ciento de todo lo correspondiente a la minería.
El año pasado, las regalías atribuibles a las explotaciones carboníferas fueron de 2,2 billones de pesos, que, a su vez, representan el 89 por ciento de todo lo correspondiente a la minería.

Si bien la preocupación por el vertimiento de gases de efecto invernadero a la atmósfera es una constante, la tecnología de filtros viene mejorando. Y aunque todavía no se ha alcanzado el ideal, los optimistas pronostican que no está lejos el momento en el cual las emisiones de dióxido de carbono se reduzcan a un mínimo.



De tal manera, no es cierto que el mercado del carbón vaya a acabarse, sino que está cambiando de geografía. Así lo refleja el comportamiento de las exportaciones colombianas. Mientras que en 2010 más de la mitad de las ventas se concentraban en Europa, ahora el Viejo Continente representa menos del 10 por ciento. Hoy por hoy, Turquía es el principal comprador de casi una cuarta parte de lo que vendemos.



La competencia, en todo caso, es muy fuerte. Suráfrica, Rusia o Australia cuentan con minas de gran tamaño y se encuentran más cerca de las naciones que son grandes consumidoras de carbón. El valor de los fletes se convierte en un factor crítico, sobre todo por cuenta de las bajas cotizaciones actuales.

Ello quiere decir que el país debería tratar de ser más competitivo, pero ese no es necesariamente el caso. “Operar se ha vuelto más difícil que antes, por cuenta de las exigencias de diferentes autoridades, del activismo judicial y de la falta de agilidad para resolver problemas puntuales”, señala Juan Camilo Nariño, de la Asociación Colombiana de Minería.



Tal como están las cosas, hay quienes no están dispuestos a funcionar a pérdida. Eso explica que las labores en Prodeco y CNR estén suspendidas hasta que cambien las condiciones, algo que puede llevar a una discrepancia seria con las autoridades.


Operar se ha vuelto más difícil que antes, por cuenta de las exigencias de diferentes autoridades, del activismo judicial y de la falta de agilidad para resolver problemas puntuales 

Cuentas que sirven

Ignorar la crisis puede salir caro en muchos frentes. Lo que está en riesgo es el segundo renglón de las exportaciones colombianas, que representa casi una quinta parte de las ventas externas del país.



De acuerdo con la Agencia Nacional de Minería, el renglón genera 130.000 empleos directos, de los cuales 30.000 corresponden a las grandes operaciones ubicadas en el Cesar y La Guajira. En buena parte se trata de puestos formales y bien remunerados, que existen en zonas donde las opciones de conseguir una buena plaza son escasas.



Si bien el carbón y el coque metalúrgico –de mayor poder calórico– que se producen en el interior del territorio nacional han podido compensar con volúmenes una reducción del 23 por ciento en los precios de ese segmento, tampoco la tienen fácil. “Si no tomamos decisiones acertadas, el país entero se verá afectado”, dice Juan Manuel Sánchez, presidente de Fenalcarbón.



El efecto sobre las finanzas regionales tampoco es despreciable. El año pasado, las regalías atribuibles a las explotaciones carboníferas fueron de 2,2 billones de pesos, que, a su vez, representan el 89 por ciento de todo lo correspondiente a la minería.



Además, no se puede olvidar que las reservas con que cuenta Colombia son cuantiosas, por lo cual desperdiciar la oportunidad de sacar el mineral y venderlo equivaldría a un gran desperdicio de recursos. Lo que corresponde es hacerlo bien y de la manera más sostenible posible, reconociendo que los desafíos de los proyectos de gran envergadura no son los mismos que los de las operaciones medianas y pequeñas.



“Tenemos la posibilidad de adaptarnos a los cambios que ya sucedieron junto con los que vienen y seguir vigentes, pero eso exige que jalemos para el mismo lado”, subraya José Miguel Linares, presidente de Drummond. “Necesitamos mejor capacidad de reacción, más creatividad, mayor flexibilidad y, como dice la expresión futbolística, juego de cintura, para salir de las dificultades”, agrega Juan Camilo Nariño.



Cruzarse de brazos ante la crisis y olvidarse de trazar una estrategia de largo plazo sería un error, y más en las actuales circunstancias. Aparte de sacrificar divisas, se estarían perdiendo empleos y recursos fiscales, que son clave en medio de las dificultades derivadas de la pandemia.





Estrategias como las que impulsa el Grupo de Diálogo sobre Minería en Colombia (GDIAM) son encomiables. Sentar alrededor de la misma mesa a personas de distintas disciplinas y visiones sirve para encontrar salidas. “Siempre hemos hecho un llamado a unir esfuerzos en pro de un interés que nos une, el nacional, y esta no debe ser la excepción. Aunque parezca mentira, siempre es posible profundizar en los consensos”, afirma Claudia Jiménez, directora ejecutiva de este esquema.



Como es evidente, el mundo seguirá utilizando el carbón para consumir energía, así estemos activos o no en el mercado internacional. Disminuir nuestra presencia no se justifica, entre otras, porque el mineral colombiano posee un bajo contenido de azufre que lo hace menos contaminante.



Ello quiere decir que no hay motivos para expedirle la partida de defunción a una actividad que todavía cuenta con futuro por delante. Y eso es bien distinto a darle a este renglón un entierro de tercera, como el que algunos desean. Por eso vale la pena enmendar la plana, antes de que sea tarde.





Sabor Barranquilla viene VIRTUAL, pero efectivo para deleitar el paladar de los barraquilleros, costeños y colombianos: Patricia Maestre

Sabor Barranquilla viene VIRTUAL, pero efectivo para deleitar el paladar de los barraquilleros, costeños y colombianos: Patricia Maestre

Por Luisemilioradaconrado

https://www.spreaker.com/user/radareconomicointernacional/radar-patricia-maestre-nos-habla-de-sabo

Este año Sabor tiene otra característica que no olvidaremos nunca.

Esta vez, se organizará de forma virtual.

¿Cómo funcionará?

Nos lo va a contar en este RADAR de hoy, Patricia Maestre que lidera el evento, que se realiza para obtener ingresos para apoyar las labores de la Cruz Roja, seccional Atlántico.

Precisamente con la señora Maestre nos conectamos por radio y por este medio para que nos ampliara cómo van los preparativos para que esta vez, SABOR BARRANQUILLA continúe su carrera exitosa.

El evento se realizará durante 10 días: septiembre 17 al 27

Prepárate con toda la familia para que disfrutemos juntos de la identidad, la cultura y la gastronomía que nos hace únicos en el mundo.

Vamos a escuchar esa charla con Patricia Maestre, ya que hoy se realizó una rueda de prensa VIRTUAL, donde se entregaron algunos datos de lo que será el evento, que arranca, como dije el 17 de septiembre –jueves-

@radareconomico1

VOTO LATINO ANÁLISIS | Cómo Biden está presionando una guerra de dos frentes contra Trump

¿Por qué Estados Unidos es el país más poderoso del mundo?

Se denomina primera potencia mundial al país que ostenta el primer lugar en cuanto a poderío militar, riqueza económica, y desarrollo tecnológico. 

En términos de PIB nominal, fuerza militar y tecnológica, se considera a los Estados Unidos de América como la primera potencia mundial.

Bueno, a eso le están apostando Joe Biden y Kamala Harris.

Obviamente, eso no será tan fácil, porque quien compite con ellos es el presidente de esa nación, Donald Trump.

Es una “riña” interesante y en pocas semanas conoceremos el resultado.

Exactamente el 5 de noviembre de 2020.

Ese día, sabremos quiénes manejarán la presidencia de Estados Unidos.

En el RADAR les contaremos. 

RADAR,luisemilioradaconrado

@radareconomico1

ANÁLISIS | Cómo Biden está presionando una guerra de dos frentes contra Trump

Por CNN en Español

(CNN) — Joe Biden se ha descrito a sí mismo como un «puente» entre las generaciones actuales y futuras de líderes demócratas. Pero también puede ser un puente entre su presente y su futuro en el mapa electoral.

Exactamente ocho semanas antes del día de las elecciones, Biden tiene grandes oportunidades de recuperar estados que el presidente Donald Trump ganó en 2016 tanto en el Cinturón de Óxido como en el Cinturón del Sol. Pero las encuestas públicas y privadas muestran constantemente que Biden se está desempeñando un poco mejor en el primer grupo de estados indecisos, centrado en Michigan, Pensilvania y Wisconsin, que en el último, que incluye Carolina del Norte, la Florida y Arizona.

Eso es algo sorprendente, porque Trump ha enfocado su mensaje y agenda con tanta precisión en las prioridades y resentimientos de los blancos mayores, rurales y no universitarios que dominan el electorado en los estados del Cinturón de Óxido, mientras que los estados del Cinturón del Sol están agregando muchos más de los votantes no blancos más jóvenes que componen cada vez más la base de los demócratas.

A lo largo de la década de 2020, muchos demócratas creen que el partido necesitará avanzar más en las contiendas parlamentarias y presidenciales en el diversificado Cinturón del Sol, incluidos no solo los objetivos de este año sino también las emergentes oportunidades lideradas por Texas y Georgia –para compensar la probabilidad de que los republicanos compitan de manera más efectiva en todo el Cinturón de Óxido predominantemente blanco.

Pero si Biden puede recuperar suficiente terreno en el Cinturón de Óxido en noviembre para ganar la Casa Blanca, ganará tiempo para que los demócratas permitan una creciente diversidad racial y una afluencia constante de profesionales blancos con educación universitaria para fortalecer su posición en los estados del Cinturón del Sol que se han inclinado de manera confiable por los republicanos durante décadas.

Así es como Biden podría ofrecerles un puente a los demócratas: su potencial para mejorar la actuación de Hillary Clinton con blancos mayores y obreros significa que incluso si se queda corto en algunos o en todos los estados del Cinturón del Sol que muchos en el partido ven como el futuro de su mandato, aún podría alcanzar los 270 votos del Colegio Electoral al recuperar Michigan, Pensilvania y Wisconsin, los tres grandes estados del Cinturón de Óxido que Trump desalojó del «muro azul» de los demócratas.

Como en muchos frentes, la estrategia electoral de Biden puede no definir la dirección a largo plazo de los demócratas, pero puede revivir lo suficiente del pasado del partido para sostenerlo hasta que ese futuro se enfoque más claramente. «Uno no quiere estar en la posición de tener que hacer funcionar el Cinturón del Sol [este año]», dice Ruy Teixeira, un analista electoral demócrata veterano que es miembro principal del Centro para el Progreso Estadounidense, de tendencia de izquierda. «Uno quiere estar en una posición de tener muchos más grados de libertad que eso. Esa es la belleza de Biden en esta elección».

El campo de batalla electoral de este año ofrece una simetría casi perfecta entre el Cinturón del Sol y el Cinturón de Óxido. Los seis estados mencionados anteriormente, que ambas partes consideran los más competitivos, se dividen a partes iguales entre las regiones. También lo hace el siguiente nivel de estados posiblemente competitivos.

Aunque enfrentan mayores probabilidades que en el primer grupo, los demócratas ven oportunidades en cuatro estados más que Trump logró la última vez: Iowa y Ohio al otro lado del Cinturón de Óxido, y Georgia y Texas en el Cinturón del Sol. Mientras tanto, los dos estados encabezados por Hillary Clinton que Trump más espera liberar, nuevamente con mayores probabilidades, también se dividen entre Cinturón de Óxido (Minnesota) y Cinturón del Sol (Nevada).

Un cambio geográfico

El número igual de estados en disputa en cada región es, en cierto sentido, inesperado. Durante la última generación, los demócratas obtuvieron mejores resultados en las contiendas presidenciales y del Congreso en el Cinturón de Óxido que en el Cinturón del Sol. De los estados potencialmente competitivos del Cinturón de Óxido este año, los demócratas ganaron cuatro de ellos en las seis elecciones de 1992 a 2012 (Michigan, Pensilvania, Wisconsin y Minnesota), Iowa, cinco veces y Ohio, cuatro. En comparación, no ganaron Texas en absoluto, Georgia, Arizona y Carolina del Norte solo una vez y Florida tres veces; sólo en Nevada (cuatro victorias) prevalecieron la mayor parte del tiempo.

Pero las elecciones de 2016, moldeadas por el mensaje y la personalidad polarizadores de Trump, sacudieron esta alineación. Detrás de las grandes ganancias entre los blancos sin títulos universitarios, avanzó en el Cinturón de Óxido, derrotando a Clinton en Ohio y Iowa, capturando por poco Michigan, Pensilvania y Wisconsin y reduciendo significativamente el margen en Minnesota, que Clinton tenía en menos de 2 puntos porcentuales. Trump se benefició de los grandes avances en los pueblos pequeños y los lugares rurales, y su fuerza en esas comunidades sigue siendo formidable hasta el día de hoy. Incluso ahora, «existe una enorme división entre las zonas urbanas y rurales» en el Medio Oeste, señala Craig Robinson, exdirector político del Partido Republicano de Iowa.

La imagen del Cinturón del Sol era más compleja. Clinton solidificó los logros demócratas anteriores en los bien educados y diversos Virginia y Colorado, moviéndolos de estados indecisos hacia un tono más profundo de azul (hasta el punto en que ninguno de los lados los considera seriamente en juego este año). Y mejoró significativamente la actuación del presidente Barack Obama en 2012 en Arizona, Georgia y Texas, otros tres estados que también están siendo remodelados por una creciente diversidad racial y una afluencia de suburbanos con educación universitaria, aunque finalmente se quedó corta en cada uno. Pero con la fuerza de Trump entre sus grupos principales de blancos mayores, no universitarios y rurales como el ariete, Clinton perdió terreno en relación con Obama en Florida, Carolina del Norte y Nevada, ganando solo el último.

Esos resultados, combinados con la estrategia de Trump de apuntar gran parte de su agenda y retórica a los obreros y los blancos rurales en temas como la inmigración y el comercio, parecieron establecer las condiciones para un cambio geográfico histórico entre las partes. Cuando Trump asumió el cargo, muchos demócratas temieron que pudiera consolidar su cabeza de playa de 2016 en el Cinturón de Óxido, lo que obligaría al partido a hacer mayores avances en el Cinturón del Sol si esperaba vencerlo este año.

En cambio, desde que asumió el cargo, Trump y el Partido Republicano han perdido terreno en ambas regiones. Pero debido a que Trump comenzó con menos margen de error en los estados del Cinturón de Óxido, las consecuencias de esa erosión han sido más severas para él allí que en el Cinturón del Sol.

Eso fue evidente en las elecciones de 2018.

Rugiendo después de las incursiones de Trump en 2016, los demócratas ganaron de manera convincente las elecciones para gobernador y el Senado en Minnesota, Michigan, Pensilvania y Wisconsin y una contienda del Senado en Ohio; aunque los republicanos ocuparon las gobernaciones en Iowa y Ohio, los demócratas también obtuvieron mejores resultados en ambas contiendas que Clinton en esos estados.

En el Cinturón del Sol, la imagen se mantuvo más confusa. Los demócratas se abrieron paso para ganar escaños en el Senado en Arizona y Nevada y la gobernación en este último. Pero incluso con candidatos carismáticos que inspiraron una gran participación, y avances significativos en los suburbios de cuello blanco alrededor de ciudades como Atlanta, Dallas y Houston, el partido se quedó corto en las contiendas de alto perfil para el Senado en Texas (detrás de Beto O’Rourke) y las gobernaciones en Georgia (Stacey Abrams) y Florida (Andrew Gillum). El veterano senador demócrata Bill Nelson también perdió en Florida. Y los demócratas fueron derrotados en las carreras para gobernador de Texas y Arizona.

Algo sorprendente

Si bien Biden tiene claras oportunidades en ambas regiones, las encuestas públicas y las encuestas internas de su campaña lo muestran nuevamente en una posición un poco más fuerte en los estados indecisos del Cinturón de Óxido que en el Cinturón del Sol. En sus clasificaciones internas, la campaña de Biden y otros grupos demócratas, como el súper PAC Priorities USA, ponen a los tres estados decisivos centrales de Cinturón de Óxido como oportunidades ligeramente mejores que cualquiera de los tres enfrentamientos en el Cinturón del Sol.

Esa no es una perspectiva que todos los demócratas o analistas (incluido yo mismo) esperaban cuando comenzó la campaña.

«Cuando comenzó el ciclo, yo creía que Arizona iba a ser más fácil para los demócratas que Wisconsin», dice el encuestador demócrata Andrew Baumann. «Pensé que esos eran los dos estados que iban a ser los estados de punto de inflexión».

LEEANÁLISIS | Trump probablemente no pueda ganar sin el apoyo de veteranos

Estas evaluaciones están determinadas por la tensión central en el panorama electoral moderno: si bien los cambios en la demografía subyacente son más favorables para los demócratas en el Cinturón del Sol, su capacidad para ganar votantes blancos sigue siendo mucho mayor en el Cinturón de Óxido.

El proyecto independiente States of Change, que Teixeira ayuda a dirigir, proyecta que desde 2016 las minorías han aumentado mucho más como porcentaje de votantes elegibles en Arizona, Nevada, Texas, Georgia y Carolina del Norte que en Michigan, Minnesota, Pennsylvania y Wisconsin. Según el pronóstico del proyecto, el mejor grupo de Trump, que son los blancos sin títulos universitarios, seguirá siendo la mayoría de los votantes elegibles en todos los grandes campos de batalla de Cinturón de Óxido (excepto Pensilvania, donde caerán un poco menos de la mitad), pero no serán más de 41% de la población elegible en cualquiera de los estados del Cinturón del Sol más disputados, o, para el caso, Virginia y Colorado.

Sin embargo, los estados del Cinturón de Óxido aún pueden resultar algo más fáciles para Biden porque muchos más votantes blancos, con y sin títulos universitarios, parecen dispuestos a votar por él allí. Encuestas públicas recientes de CBS News y Fox News en Wisconsin; Universidad de Quinnipiac y Franklin & Marshall College en Pennsylvania; y la Universidad de Monmouth en Iowa a principios de este verano mostraron que Biden ganó al menos el 40% de los blancos sin títulos universitarios en esos estados y mantuvo su déficit con Trump entre ese grupo en aproximadamente 10-15 puntos porcentuales.

Por el contrario, encuestas recientes de Monmouth en Carolina del Norte y principios de este verano en Georgia; encuestas de verano de Quinnipiac en Texas y Carolina del Sur; y una nueva encuesta de Dallas Morning News / Universidad de Texas en Tyler en Texas mostraron que Biden no atrae a más del 28% de los blancos sin títulos universitarios en esos estados y sigue a Trump por márgenes que se extienden hasta 50 puntos porcentuales. (Una encuesta de Fox en Carolina del Norte puso a Biden con 31% de los votantes allí). Solo en Florida (Quinnipiac) y Arizona (Fox) Biden se acercó a la marca del 40% en las encuestas públicas recientes con esos blancos obreros, que él rutinariamente alcanza en el Cinturón de Óxido.

Los expertos políticos ofrecen varias explicaciones para estas enormes disparidades: más blancos no universitarios en el sur son cristianos evangélicos, menos tienen experiencia con sindicatos y más pueden ser receptivos a los llamamientos abiertos de Trump al resentimiento racial. Pero sea cual sea la causa, los elevados márgenes de Trump entre los blancos no universitarios del sur, incluso si potencialmente disminuyeron ligeramente con respecto a sus niveles de 2016, siguen siendo un gran obstáculo para los demócratas que esperan cambiar a Carolina del Norte, mucho menos a Georgia y Texas o, en algún momento futuro, a Carolina del Sur.

«En Texas y Georgia, Carolina del Norte, los márgenes de los blancos no universitarios son como una montaña», dice Teixeira. «Eso es algo que siempre hay que tener en cuenta».

No solo este año, sino en toda la década de 2020, la perspectiva demócrata de superar esos déficits con los blancos de clase trabajadora del Cinturón del Sol probablemente dependerá de seguir la misma fórmula que llevó a Colorado y Virginia de manera confiable a su campo: beneficiarse del crecimiento de la población minoritaria mientras mejora su desempeño entre los blancos suburbanos con educación universitaria.

La ronda de encuestas más reciente muestra que Biden lidera sustancialmente a Trump entre los votantes blancos con educación universitaria en los estados clave del Cinturón de Óxido; tanto las encuestas de Quinnipiac como las de Franklin & Marshall, por ejemplo, mostraron a Biden adelante en Pensilvania por más de 20 puntos porcentuales. En el Cinturón del Sol, su posición con los blancos universitarios no es tan fuerte ni tan consistente.

Las últimas encuestas lo muestran dejando pistas de alrededor de una docena de puntos porcentuales con ellos en Arizona y Florida, lo que probablemente sería suficiente para ganar esos estados, y una estrecha ventaja en Carolina del Norte que deja al estado en el punto de inflexión. Pero en Texas y Georgia, Biden todavía está luchando por superar el 40% con esos votantes, aproximadamente el mismo nivel de apoyo que O’Rourke y Abrams obtuvieron en sus estrechas derrotas.

Cimientos cambiantes

Otra gran incertidumbre es si Biden puede inspirar una gran participación entre las minorías, especialmente entre los jóvenes. Eso mejoraría la suerte de los demócratas en ambas regiones, pero especialmente en los estados del Cinturón del Sol, donde las personas de color dominan a los nuevos votantes que cumplen 18 años cada año.

Aunque Biden luchó con los jóvenes durante las primarias demócratas y las encuestas públicas han ofrecido imágenes contrastantes de su entusiasmo por las elecciones generales, una encuesta que Baumann publicó la semana pasada para el grupo de defensa NextGen America encontró niveles inesperadamente altos de interés entre los jóvenes, con los negros e hispanos tan comprometidos como los blancos. Entre los jóvenes, debido a su fuerte antipatía hacia Trump, «no hay duda de que [Biden] está mejor posicionado en términos de márgenes y participación que Clinton», insiste Baumann.

Las fortalezas y debilidades únicas de Biden refuerzan estas dinámicas regionales subyacentes. Las encuestas han planteado repetidamente preguntas sobre si Biden, quien también luchó con los hispanos durante las primarias, igualará los márgenes de Clinton con ese creciente bloque de votantes; Trump, creen algunos en ambos partidos, puede estar posicionado para mejorar levemente su desempeño en 2016, particularmente con los hombres hispanos. Por el contrario, los estrategas de ambos lados están de acuerdo en que Biden no aleja a tantos votantes blancos no universitarios de Cinturón de Óxido como Clinton, a quien muchos percibían como una elitista que los despreciaba.

«Algunos de esos votantes blancos no universitarios, particularmente los mayores, que se habían movido hacia Trump están regresando a Biden en el Cinturón de Óxido, lo que ha debilitado ese movimiento que vimos alejarse de los demócratas», dice Baumann. «Y ciertamente parece que Biden es un poco más débil con los hispanos que Hillary, lo que debilita sus ganancias potenciales en el Cinturón del Sol. Entonces, si juntas esas cosas, el Cinturón de Óxido todavía parece un poco más fuerte».

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Con la base política cambiando en ambas regiones, la gama de posibles resultados se está multiplicando. El día de las elecciones de 2016, escribí: «El riesgo para Hillary Clinton es que la base de su partido en el Cinturón de Óxido se esté fracturando antes de que las fuerzas gemelas de la diversidad y el aumento de los niveles de educación hayan avanzado lo suficiente como para proporcionar a los demócratas un punto de apoyo seguro en el Cinturón del Sol».

Eso es exactamente lo que le sucedió a Clinton: se quedó corta en los campos de batalla clave del Cinturón del Sol y perdió por márgenes aún menores en las decisivas contiendas del Cinturón de Óxido. Ese sigue siendo el escenario de pesadilla para los demócratas este año: Trump moviliza a los blancos que no asisten a la universidad para pasar de nuevo en el Cinturón de Óxido, mientras que Biden no logra energizar lo suficiente a los no blancos (y / o convertir a suficientes blancos bien educados) para voltear los grandes campos de batalla del Cinturón del Sol.

Pero Trump ahora enfrenta el riesgo de un escenario opuesto. Biden podría recuperar los campos de batalla clave del Cinturón de Óxido retrocediendo lo suficiente entre blancos mayores y no universitarios mientras avanza más en los suburbios de cuello blanco y mejora la participación de las minorías incluso ligeramente. Al mismo tiempo, las dos últimas dinámicas podrían permitirle cambiar algunos de los campos de batalla del Cinturón del Sol, incluso si los obreros blancos permanecen abrumadoramente detrás de Trump. Eso produciría una elección espectacular.

Lo más preocupante para Trump es que Biden puede alcanzar la mayoría en el Colegio Electoral incluso si se abre paso solo en uno de estos frentes.

«Uno de los beneficios del mapa que existe ahora es que tenemos múltiples caminos hacia 270», dice Katie Drapcho, directora de encuestas e investigación de Priorities USA. «De los seis [grandes estados indecisos] podemos ganar algunos de ellos, no ganar algunos de ellos, y aún así negarle a Trump un camino hacia la reelección».

Por supuesto, aunque la posición de Biden parece más fuerte en este momento que la de Clinton, vale la pena mencionar que los demócratas también se sintieron así durante la mayor parte de las últimas semanas de 2016.

China y la India se acusan mutuamente de disparos mientras aumentan las tensiones fronterizas

Cuando era un muchacho no les tenía temor a los mayores.

Como dicen los jóvenes: “me la jugaba con cualquier pelao”, aunque fuera más grande.

Sin embargo, con el tiempo, empecé a madurar.

Y eso es normal. La madurez nos va llegando con los años.

Así deberían ser los países.

En este mundo económico que presenciamos a través del trabajo que realizamos diariamente, observamos lo que sucede en el mundo.

Sorprende, eso sí, que naciones tan antiguas sigan “peleando” por los territorios.

Lo que dicen algunos es cierto: “El mundo es de todos”. Sin embargo, son muchas las naciones que no han entendido ese mensaje.

Lo que pasa entre China e India, los dos países más poblados del universo, es inconcebible.

Peleando como pelaos…

RADAR,luisemilioradaconrado

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China y la India se acusaron mutuamente de haber hecho disparos de advertencia durante un enfrentamiento en su disputada frontera en el Himalaya.

Nueva Delhi (CNN) — China y la India se acusaron mutuamente de haber hecho disparos de advertencia durante un enfrentamiento ayer lunes en su disputada frontera en el Himalaya, una marcada escalada en las tensiones entre las dos potencias nucleares.

Según los reportes, el incidente es la primera vez que se realizan disparos a lo largo de la frontera entre China y la India en más de cuatro décadas, pero ambas partes han culpado a la otra por violar los acuerdos bilaterales y realizar acciones «provocadoras».

En un comunicado el lunes por la noche, un portavoz del Comando de Teatro Occidental del Ejército Popular de Liberación de China dijo que las tropas indias «cruzaron ilegalmente» la Línea de Control Real (LAC), la línea de demarcación poco definida que separa los dos países, y entraron en Shenpao. región montañosa cerca de la orilla sur de Pangong Tso, un lago estratégicamente ubicado en la sección occidental de la frontera de 3.379 kilómetros de largo.

«Los soldados indios dispararon descaradamente tiros de advertencia a los soldados de las patrullas fronterizas chinas que se acercaron a negociar, y los soldados fronterizos chinos se vieron obligados a tomar contramedidas para estabilizar la situación», dijo el coronel mayor Zhang Shuili, portavoz militar chino, sin especificar qué fueron esas «contramedidas».

Calificándolo de «provocación militar seria», Zhang pidió a la parte india que «detenga inmediatamente las acciones peligrosas … restrinja estrictamente a los soldados de primera línea e investigue y castigue seriamente al personal que disparó para asegurarse de que incidentes similares no se repitan».

El martes, el Ejército indio rechazó las acusaciones de China y calificó la declaración como «un intento de engañar a su audiencia nacional e internacional».

Dijo que los soldados indios habían «ejercido una gran moderación y se habían comportado de una manera madura y responsable» y, en cambio, acusó al Ejército chino de «violar abiertamente los acuerdos y realizar maniobras agresivas».

Según la India, fueron las tropas chinas las que intentaron «acercarse» a una de las posiciones avanzadas que tenían los soldados indios a lo largo de la frontera. Cuando las tropas indias los disuadieron, los soldados del Ejército Popular de Liberación de China (EPL) dispararon «algunas rondas al aire en un intento de intimidarlos», según un comunicado del Ejército indio.

«En ningún momento el Ejército de la India ha transgredido a través de la LAC o recurrido al uso de cualquier medio agresivo, incluido los disparos», dice el comunicado.

«Primeros disparos» en décadas

Se cree que esta es la primera vez que se realizan disparos a lo largo de la frontera entre China y la India desde 1975, cuando cuatro soldados indios fueron asesinados por tropas chinas en un paso remoto en el extremo oriental de la frontera, de acuerdo con Harsh V. Pant, profesor de Relaciones Internacionales en King’s College, Londres.

El martes, Zhao Lijian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, confirmó que el incidente fue el primer tiroteo a lo largo de la frontera en 45 años y aseguró que «la parte india disparó primero contra los soldados fronterizos chinos».

«La tranquilidad es interrumpida por los disparos. La parte china siempre enfatiza que ambas partes deben resolver pacíficamente nuestras diferencias a través del diálogo y la consulta», dijo Zhao en una conferencia de prensa.

China y la India han disputado el área que rodea el lago Pangong Tso desde que ambos países pelearon una sangrienta guerra fronteriza en 1962. La Línea de Control Real, que pasa por el lago, se estableció a raíz del conflicto original. Aunque aparece en los mapas, India y China no están de acuerdo en su ubicación precisa y ambos se acusan regularmente de sobrepasarla o de buscar expandir su territorio.

En 1996, los dos países firmaron un acuerdo que establece que ninguna de las partes abrirá fuego dentro de 2 kilómetros desde la LAC para «prevenir actividades militares peligrosas».

Ese fue uno de los acuerdos firmados por China y la India desde 1993 para «mantener las fuerzas al nivel mínimo en la frontera» y «dar forma al comportamiento de los soldados», dijo el ministro de Relaciones Exteriores de India, Subrahmanyam Jaishankar.

«Si estos no se observan, entonces surgen preguntas muy, muy importantes. En este momento, noto que esta gravísima situación ha ocurrido desde principios de mayo», dijo en un acto el lunes.

Ambas partes se adhirieron al acuerdo en un enfrentamiento violento en el valle de Galwan, no lejos de Pangong Tso, en junio. Durante esa disputa, los soldados pelearon con puños, piedras y palos de bambú con clavos en una reyerta sangrienta que dejó al menos 20 soldados indios muertos. China nunca ha reconocido víctimas de ese enfrentamiento.

La situación se resolvió temporalmente después de que las dos partes entablaran conversaciones y retiraran a los soldados. Pero las tensiones volvieron a estallar la semana pasada cuando Delhi y Beijing se acusaron mutuamente de llevar a cabo acciones provocadoras cerca de Pangong Tso.

Du Youkang, profesor de estudios del sur de Asia en la Universidad Fudan en Shanghai, dijo que los disparos de advertencia eran una escalada «seria» de la disputa fronteriza.

«Ambas partes han llegado a un consenso, sabiendo que las cosas podrían estallar una vez que se hicieran disparos. Ni siquiera se debería haber permitido disparar al aire», dijo.

El incidente del lunes se produjo mientras ambas partes mantenían conversaciones de alto nivel en un intento por reducir las tensiones. El viernes pasado, los ministros de defensa de China y la India se reunieron al margen de la Organización de Cooperación de Shanghai en Moscú y los ministros de Relaciones Exteriores de ambos países tienen programado reunirse allí el jueves.

Pero Pant, el profesor del King’s College de Londres, dijo que cree que las tensiones en la frontera entre China y la India se convertirían en una «nueva normalidad».

«La confianza ha desaparecido por completo de la relación … la LAC va a ser extremadamente volátil y lo seguirá siendo en el futuro previsible a menos que se encuentre una solución permanente al problema», dijo.

«Porque el paradigma más antiguo, los marcos más antiguos, se han derrumbado por completo y no hay marcos nuevos en este momento, ya que las dos naciones están luchando por aceptar esta realidad».

Manveena Suri y Shawn Deng de CNN contribuyeron al reportaje.