Eso que dice, mi querida hermana Mabel del Carmen, es la pura verdad: "Se lavan las manos cada 2 horas y se secan con la toalla que no lavan hace 3 meses".
¿Qué tal?
RADAR (Abre el texto y encontrarás el mensaje)
https://www.facebook.com/photo.php?fbid=10158833630919041&set=a.10152927308674041&type=3&theater&comment_id=10158833690454041&reply_comment_id=10158840587189041&force_theater=1¬if_t=photo_reply¬if_id=1584578453750765
miércoles, 18 de marzo de 2020
Presidente, Iván Duque, y la emergencia del coronavirus y agradeció el respaldo de los profesionales de la salud en esta coyuntura
Presidente, Iván Duque, y la emergencia del coronavirus y agradeció el respaldo de los profesionales de la salud en esta coyuntura
Me gustó como arrancó el presidente Iván Duque: “Quiero agradecerles a
todos los profesionales de la salud, a todos los médicos, enfermeras, personal
de soporte que está trabajando todos los días porque ellos son los héroes y
heroínas en esta coyuntura.
Nuestra gratitud como colombianos a ellos.
Nuestro reconocimiento por su ardua labor”.
Esta mañana el presidente Iván Duque apareció en televisión y en muchos medios de comunicación hablando de la emergencia, el paquete de medidas que ha tomado
nuestro gobierno para enfrentar la epidemia que está azotando al mundo entero.https://www.spreaker.com/user/radareconomicointernacional/covid-duque-1-declaratoria-emergencia-1
El COVID-19. El coronavirus nos tiene a todos con los pelos de punta. Y
no es para menos.
Se está muriendo gente en todos los países.
Y el gobierno colombiano ha tomado medidas para evitar desgracias.
El mandatario recordó el decreto 215 de la Constitución Nacional y señaló
que esta situación nos debería unir para enfrentar esta difícil situación, al
contrario, debería unirnos más.
Debemos actuar más con el corazón. Que somos hermanos como colombianos.
Se han tomado decisiones para que no ingresen al país sin permiso los
extranjeros. Son decisiones que han tomado otras naciones: Perú, Ecuador,
Brasil, Venezuela, pero son medidas coordinadas con la OEA y, en parte, la
Organización Mundial de la Salud (OMS).
Vamos a escuchar al presidente Iván Duque, quien se refería al tema esta
mañana a nivel nacional e internacional por la televisión colombiana.
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Autoridades colombianas reportan primer caso de coronavirus en el país
Esta mañana, los colegas de BLU radió en Colombia socializaron esta información que es clave en estos momentos a nivel mundial: Primer niño con coronavirus.
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Autoridades colombianas reportan primer caso de coronavirus en el país
https://omny.fm/shows/ma-anas-blu/autoridades-reportan-el-primer-ni-o-con-coronaviru?fbclid=IwAR0d2nueRt-IwEcZcxznOTrkrvHA0gbZrW8xdpoqq4Q1M3ORyNQIzwMhLow
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Autoridades colombianas reportan primer caso de coronavirus en el país
https://omny.fm/shows/ma-anas-blu/autoridades-reportan-el-primer-ni-o-con-coronaviru?fbclid=IwAR0d2nueRt-IwEcZcxznOTrkrvHA0gbZrW8xdpoqq4Q1M3ORyNQIzwMhLow
ESTADO de EMERGENCIA en Colombia con base al Artículo 215 de la Constitución Nacional.
El coronavirus nos ha servido hasta para revisar nuestra Constitución
Colombiana…
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Es bueno conocer este artículo
ESTADO
de EMERGENCIA en Colombia con base al Artículo 215 de la Constitución Nacional.
Artículo 215. Cuando sobrevengan hechos distintos de los previstos en los
artículos 212 y 213 que perturben o amenacen perturbar en forma grave e
inminente el orden económico, social y ecológico del país, o que constituyan
grave calamidad pública, podrá el Presidente, con la firma de todos los
ministros, declarar el Estado de Emergencia por períodos hasta de treinta días
en cada caso, que sumados no podrán exceder de noventa días en el año
calendario. Mediante tal declaración, que deberá ser motivada, podrá el
Presidente, con la firma de todos los ministros, dictar decretos con fuerza de
ley, destinados exclusivamente a conjurar la crisis y a impedir la extensión de
sus efectos.
Estos decretos deberán referirse a materias que tengan relación
directa y específica con el Estado de Emergencia, y podrán, en forma transitoria,
establecer nuevos tributos o modificar los existentes. En estos últimos casos,
las medidas dejarán de regir al término de la siguiente vigencia fiscal, salvo
que el Congreso, durante el año siguiente, les otorgue carácter permanente.
El
Gobierno, en el decreto que declare el Estado de Emergencia, señalará el
término dentro del cual va a hacer uso de las facultades extraordinarias a que
se refiere este artículo, y convocará al Congreso, si éste no se hallare
reunido, para los diez días siguientes al vencimiento de dicho término. El
Congreso examinará hasta por un lapso de treinta días, prorrogable por acuerdo
de las dos cámaras, el informe motivado que le presente el Gobierno sobre las
causas que determinaron el Estado de Emergencia y las medidas adoptadas, y se
pronunciará expresamente sobre la conveniencia y oportunidad de las mismas.
El
Congreso, durante el año siguiente a la declaratoria de la emergencia, podrá
derogar, modificar o adicionar los decretos a que se refiere este artículo, en
aquellas materias que ordinariamente son de iniciativa del Gobierno. En
relación con aquellas que son de iniciativa de sus miembros, el Congreso podrá
ejercer dichas atribuciones en todo tiempo.
El Congreso, si no fuere convocado,
se reunirá por derecho propio, en las condiciones y para los efectos previstos
en este artículo. El Presidente de la República y los ministros serán
responsables cuando declaren el Estado de Emergencia sin haberse presentado
alguna de las circunstancias previstas en el inciso primero, y lo serán también
por cualquier abuso cometido en el ejercicio de las facultades que la
Constitución otorga al Gobierno durante la emergencia.
El Gobierno no podrá
desmejorar los derechos sociales de los trabajadores mediante los decretos
contemplados en este artículo.
PARÁGRAFO. El Gobierno enviará a la Corte Constitucional al día siguiente de su expedición los decretos legislativos que dicte en uso de las facultades a que se refiere este artículo, para que aquella decida sobre su constitucionalidad. Si el Gobierno no cumpliere con el deber de enviarlos, la Corte Constitucional aprehenderá de oficio y en forma inmediata su conocimiento
PARÁGRAFO. El Gobierno enviará a la Corte Constitucional al día siguiente de su expedición los decretos legislativos que dicte en uso de las facultades a que se refiere este artículo, para que aquella decida sobre su constitucionalidad. Si el Gobierno no cumpliere con el deber de enviarlos, la Corte Constitucional aprehenderá de oficio y en forma inmediata su conocimiento
Una acción rápida puede ayudar a los países en desarrollo a limitar los daños económicos de la enfermedad por coronavirus
Coronavirus.
Esa es la noticia.
El Banco Mundial nos
había recomendado que tocáramos el tema.
Proteger a nuestras
familias. Y no descuidarnos.
Eso era bueno, porque
al principio, no dimensionamos el peligro.
Para nosotros era
algo pasajero.
No olvidemos que
China es uno de los países más poderosos del planeta y lo que ocurre allí
repercute en el orbe. Nada que hacer. Igual pasa con Estados Unidos. Lo mismo
en India, América Latina, Europa… en fin. Esto se volvió algo global.
Las nuevas tecnologías
también nos cambiaron la vida.
Mi hija Sandra vive
en Australia.
Igual María Elena,
una de nuestras mejores amigas. Y hasta allá llegó el coronavirus.
Estoy en contacto con
Sandra y vamos siguiéndole el rastro al coro. El coronavirus está en nuestras
familias y no debemos permitir que nos golpee y nos cambie el rumbo.
Atentos para no
cometer errores fatales.
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Una
acción rápida puede ayudar a los países en desarrollo a limitar los daños
económicos de la enfermedad por coronavirus
09 DE MARZO DE 2020
El brote de la nueva enfermedad por coronavirus (COVID-19) ha causado ya
un alto costo en vidas humanas y se reconoce por lo que es, una emergencia sanitaria mundial. A medida que el virus se
propaga por el planeta, la pregunta es ahora si se pueden proteger las vidas de
las personas y detener los daños económicos.
A partir de experiencias pasadas, sabemos que una acción
firme, coordinada y rápida marca la diferencia cuando la economía mundial
enfrenta una amenaza común. Eso está empezando a
ocurrir. Diversos países han anunciado programas de estímulos, varios han
reducido las tasas de interés y tanto el Grupo Banco Mundial como el Fondo Monetario Internacional (i) han dado a conocer
grandes paquetes de asistencia financiera para ayudar a los países a afrontar
la crisis sanitaria y limitar los perjuicios económicos.
En las próximas semanas, todos los países deberán tomar medidas de
políticas concretas para proteger a sus poblaciones y reducir los daños a sus
economías.
Sin embargo, lo que viene será crucial: en las próximas semanas, todos
los países —incluso aquellos que no tienen ningún paciente con la enfermedad
por coronavirus— deberán tomar medidas de políticas concretas para proteger a
sus poblaciones y reducir los daños a sus economías.
Nadie puede predecir de manera fiable el impacto económico total.
Demasiado depende de cosas que son imposibles de saber, como la duración del
brote, la cantidad exacta de países afectados y la magnitud de la movilización
y mantención de una respuesta normativa rápida, coordinada y concertada. Pero
sí sabemos que el brote se manifestó en un momento en que la economía mundial
estaba débil, cuando el crecimiento global empezaba a recuperarse de su tasa más baja (i) desde la crisis
financiera de 2009.
Esto tiene consecuencias preocupantes para los países en desarrollo:
condiciones más estrictas de los créditos, un crecimiento más débil y el desvío
de recursos públicos para combatir el brote podría disminuir los fondos
disponibles para prioridades de desarrollo fundamentales. Una recesión
económica podría afectar también la lucha contra la pobreza extrema. Es
imprescindible, por lo tanto, que los encargados de formular las políticas en
todas partes reconozcan de qué manera los daños económicos se pueden traspasar
de un país a otro, y actúen rápidamente para prevenir que se propaguen.
Es probable que ese traspaso se produzca a través de diversas vías. La
primera es el comercio: las cadenas de valor mundiales, que representan alrededor de la mitad del comercio mundial (i), se ven
interrumpidas por cierres de fábricas y retrasos en la reanudación de las
operaciones. La segunda son los flujos financieros externos, que se podrían
retirar de los países afectados por esta enfermedad. La tercera es el capital
nacional —tanto humano como financiero— que está empezando a ser desaprovechado
a medida que las fábricas están inactivas y las personas permanecen en sus
hogares. La cuarta es el transporte y el turismo, una importante fuente de
ingresos para numerosos países en desarrollo (i) que está
disminuyendo con la baja de la demanda y el aumento de las restricciones para
viajar. Por último, las bruscas caídas de los precios de los productos básicos
perjudicarán a los países en desarrollo que dependen de ellos para obtener
ingresos que tanto necesitan.
Los Gobiernos deben evitar las políticas proteccionistas, que podrían
empeorar las alteraciones en las cadenas de valor mundiales y aumentar los ya
elevados niveles de incertidumbre. Pero más importante aún, los Gobiernos deben
evitar la restricción de las exportaciones de alimentos y productos médicos
necesarios y, en cambio, trabajar juntos para apoyar una mayor producción y
asegurar que los recursos lleguen a los lugares donde más se requieren.
Para hacer frente a estos desafíos será necesaria la cooperación mundial.
Los Gobiernos deben evitar las políticas proteccionistas, que podrían empeorar
las alteraciones en las cadenas de valor mundiales y aumentar los ya elevados
niveles de incertidumbre. Pero más importante aún, los Gobiernos
deben evitar la restricción de las exportaciones de alimentos y productos
médicos necesarios y, en cambio, trabajar juntos para apoyar una mayor
producción y asegurar que los recursos lleguen a los lugares
donde más se requieren. En el mediano plazo, y a medida que las condiciones
económicas mejoren, la recomendación para los responsables de las políticas es no
mirar introspectivamente, sino incentivar a las empresas a mantener altos
niveles de inventarios y a diversificar a sus proveedores para gestionar mejor
los riesgos.
Además de la cooperación, será necesaria la asistencia internacional,
particularmente para los países de África al sur del Sahara que carecen de la
infraestructura sanitaria que se requiere para frenar la pandemia. Y todos
los países deben colaborar para aumentar la transparencia en la información
sobre la propagación del brote, ya que el miedo y la desinformación puede
aumentar sus impactos económicos.
Por su parte, los países en desarrollo deben actuar rápidamente para:
- Aumentar el gasto en
salud: en muchos países en desarrollo, los sistemas de salud pública
siguen siendo débiles, haciendo que sus poblaciones sean vulnerables a la
rápida propagación del brote. Los Gobiernos deben incrementar las
inversiones que refuercen estos sistemas para permitir programas de
tratamiento y control más rápidos.
- Fortalecer las redes de
protección social: las transferencias de efectivo y los servicios médicos
gratuitos para las personas más vulnerables podrían ayudar a frenar el
brote y también a limitar los daños financieros derivados de este.
- Apoyar al sector
privado: dado que es probable que empresas de todo tipo se vean afectadas,
sería beneficioso que estas tengan acceso a créditos, reducciones de
impuestos o subsidios de corto plazo.
- Contrarrestar las alteraciones de los mercados financieros: los bancos centrales en los países en desarrollo —en particular aquellos que son susceptibles a periodos de aversión al riesgo— deben estar preparados para reaccionar a movimientos de los mercados financieros incontrolados. Tal vez necesiten bajar las tasas de interés e inyectar liquidez para restablecer la estabilidad financiera y aumentar el crecimiento.
Los responsables de las políticas enfrentan tiempos difíciles y deben
estar a la altura de las circunstancias, actuando de manera rápida, firme y
colaborativa.
El Grupo Banco Mundial está desempeñando una función clave para ayudar a
los países en desarrollo a adoptar las medidas necesarias en estas esferas. Con
nuestro paquete inicial acelerado por un monto de
USD 12 000 millones proporcionaremos apoyo inmediato para los
esfuerzos de los países en desarrollo dirigidos a fortalecer los sistemas
sanitarios y minimizar los daños a las personas y las economías. Dependiendo de
la duración y la gravedad de la pandemia, estaremos preparados para poner en
marcha una segunda fase de asistencia, con un mayor énfasis en los impactos
sociales y económicos.
Con el paquete se moviliza un conjunto completo de nuestras capacidades
—provenientes del Banco, la Asociación Internacional de Fomento (AIF) y la
Corporación Financiera Internacional (IFC)— para limitar los daños tan pronto
como sea posible. IFC, por ejemplo, está trabajando con los bancos comerciales
a fin de aumentar el financiamiento del comercio y el capital de trabajo para
las empresas. También apoyará directamente a sus clientes corporativos,
concentrándose en sectores estratégicos, como el equipamiento médico y los
productos farmacéuticos, para mantener las cadenas de suministro y reducir los
riesgos de deterioro de la situación.
A pesar de las turbulencias en los mercados financieros, los encargados
de formular las políticas deben mantener la calma. Deben utilizar todos los
instrumentos normativos que tienen a su disposición, entre ellos las políticas
monetarias, fiscales, comerciales y de inversión, para aumentar la confianza.
Durante la última crisis financiera mundial, la respuesta normativa coordinada y
sincronizada fue crucial para controlar dicha crisis. Una vez
más, los responsables de las políticas enfrentan tiempos difíciles y deben
estar a la altura de las circunstancias, actuando de manera rápida, firme y
colaborativa.
Desde el 14 de marzo y hasta el 30 de abril de 2020, cierre total de espacios culturales del Banco de la República de Colombia
El Banco de la
República, acogiendo las decisiones del Gobierno Nacional, informa
Esta medida aplica para el Museo del Oro, la Biblioteca Luis Ángel Arango y su centro de eventos, la Casa Republicana, la Casa Gómez Campuzano, el Museo de Arte Miguel Urrutia -MAMU, el Museo Botero y el Museo Casa de Moneda en Bogotá, así como para todos los Centros Culturales en las 28 ciudades del país en donde el Banco tiene sede.
Nos cambió la vida.
Se acabó por un
tiempo nuestra tranquilidad.
¿O será que, más
bien, nos llegó un momento de calma y reflexión?
Como usted lo quiere
tomar.
Pero nos llegó un
pare por una enfermedad que no es tan grave, pero que debe atenderse
seriamente.
El coronavirus llegó
a nuestro mundo.
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Desde el 14 de marzo y
hasta el 30 de abril de 2020, cierre total de espacios
culturales del Banco de la República de Colombia
El Banco de la
República, acogiendo las decisiones del Gobierno Nacional, informa:
Esta medida aplica para el Museo del Oro, la Biblioteca Luis Ángel Arango y su centro de eventos, la Casa Republicana, la Casa Gómez Campuzano, el Museo de Arte Miguel Urrutia -MAMU, el Museo Botero y el Museo Casa de Moneda en Bogotá, así como para todos los Centros Culturales en las 28 ciudades del país en donde el Banco tiene sede.
En esas mismas fechas
se programarán actividades virtuales relacionadas con las colecciones y
servicios culturales, más no actividades en los espacios físicos.
Aquellas personas que
actualmente tienen libros en préstamo deberán devolverlos en fecha establecida
a través de los buzones que se dispondrán para este fin.
Pandemia de coronavirus estremece la economía mundial ANTONIO PANEQUE BRIZUELA | FOTO: RTVES
El coronavirus, el
covid-19 nos está uniendo a todos.
Es más, pienso que
nos habíamos demorado para enfrentar esta emergencia.
Una emergencia que se ha
convertido en una Pandemia y que está estremeciendo a la economía mundial.
Desde la misma
Organización Mundial de la Salud (OMS), nos llegaron los avisos.
Casi todos los
gobiernos se han unido.
Sin embargo, todavía
hay ciudadanos en Barranquilla, Colombia y el mundo que no han entendido la
emergencia.
En estaderos
barranquilleros se tomaba cerveza este domingo, como si nada estuviera pasando.
Una paciente sale
molesta de una emergencia sabiendo que tiene el virus y no le importó infectar
a los demás… en fin.
Antonio Paneque, de
la ACN, la Agencia Cubana de Noticias, nos comparte esta situación.
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Pandemia
de coronavirus estremece la economía mundial
ANTONIO PANEQUE
BRIZUELA | FOTO: RTVES
17 MARZO 2020
El nuevo coronavirus
(COVID-19) constituye ya una pandemia, según la Organización Mundial de la
Salud (OMS), y acumula graves daños contra la economía mundial que se extienden
por todo el planeta.
Desde su aparición en
China a fines de 2019, la humanidad enfrenta esa especie de debacle sanitaria
de cifras tan volátiles que resultan imposibles de seguir con exactitud,
mientras la economía se enlentece y marcha hacia una recesión y las bolsas se
derrumban de forma estrepitosa.
La OMS estima en 4
mil 200 la cifra de muertos, entre 120 mil contagiados, de 114 Estados (14 de
ellos latinoamericanos y caribeños), al tiempo que la Conferencia de la ONU sobre
Comercio y Desarrollo
(Unctad) y la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) describen
secuelas catastróficas.
De acuerdo con un
estudio de la Unctad, las secuelas del nuevo coronavirus disminuirán este año
el crecimiento global hasta menos del
2,5 por ciento, en medio de un escenario a la baja con un déficit de dos billones de dólares en el ingreso global.
2,5 por ciento, en medio de un escenario a la baja con un déficit de dos billones de dólares en el ingreso global.
La tendencia a
disminuir la producción fabril de naciones afectadas por el virus como China,
Estados Unidos, Alemania, Japón, Corea del Sur o Italia, con la consiguiente
reducción en el gasto de combustibles, deprime también la extracción y ventas
de petróleo y agrava la actual guerra entre los grandes productores.
Por eso es coherente
que la Unctad sitúe en ese entorno de reducción de crecimiento a los países
exportadores del crudo entre las economías más afectadas, junto a otras
generadoras de productos básicos, todos los cuales podrían perder un punto
porcentual de incremento económico.
Los precios del
barril de petróleo Brent, el referente en Europa, cayeron hasta los 35,58
dólares, después de cerrar el martes en 34,88 dólares; en tanto el otro líder
principal del mercado de crudos, el West Texas estadounidense, retrocedió hasta
los 33,20 dólares frente a los 35,88 dólares de ese martes.
Y en ese escenario
energético también sobresale China, omnipresente en casi todas las carreteras
mercantiles internacionales y en especial la energética, por ser el territorio
mayor importador de combustible y un gran comprador de materias primas.
También, acorde con
las fuentes, sufrirán un impacto estimado entre un 0,7 y 0,9 por ciento de
desaceleración los Estados asociados a los conmocionados por el coronavirus,
como Canadá, México y la región centroamericana, insertados en cadenas internacionales
de Asia oriental y meridional.
El nerviosismo y la
pérdida de confianza de consumidores e inversores figuran entre los signos más
inmediatos de propagación de esas reducciones comparativas con las cifras
iniciales de los pronosticadores para 2020, cuyas diferencias sobrepasan
límites calculados en billones de dólares.
Del mismo modo, a
causa del COVID-19 sufriría serios daños la inversión extranjera directa, con
una disminución entre un cinco y un
15 por ciento, y, en caso de que la epidemia se extienda durante todo el año, llegaría a sus niveles más bajos desde la crisis financiera de 2008.
15 por ciento, y, en caso de que la epidemia se extienda durante todo el año, llegaría a sus niveles más bajos desde la crisis financiera de 2008.
Las industrias
automotriz, de aviación y de energía aparecen entre las más afectadas en
materia inversionista, mientras los países de mayor impacto negativo serán los
que como China recibieron los primeros golpes de la actual pandemia, cuyas
interrupciones de suministros afectarán, además, a las economías de otros con
demanda de ellos.
Una importante área
diezmada por el virus es la exportación mundial, que solo en febrero último
bajó en 50 mil millones de dólares, lo cual produjo una contracción del dos por
ciento en la producción manufacturera.
Ello afecta de manera
especial al gigante asiático, mayor exportador del mundo y su segunda economía
con el 16 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), eslabón imprescindible
en la cadena global y gran suministrador de rubros como teléfonos celulares,
componentes de autos y equipos médicos.
Pero tampoco se
salvan de las secuelas de la pandemia las economías de la Unión Europea,
Estados Unidos, Japón y Corea del Sur, que figuran en el grupo de las más
impactadas por el brote de la enfermedad.
Otra fuente que
acredita el estancamiento es la OCDE, al advertir sobre una reducción de la
mitad del crecimiento mundial; mientras el Instituto de Finanzas
Internacionales (IIF) considera que el COVID-19 solo permitirá un punto
porcentual de crecimiento global en 2020, la cifra más baja en una década.
Ese exiguo avance
causado sobre todo por las caídas que sufrirían China, Estados Unidos,
Alemania, Japón y otros mercados emergentes, contrastaría con el aumento de 2,6
por ciento registrado el pasado 2019.
En el caso de China,
nación bien conocida como “la gran fábrica del mundo”, el PIB solo crecería un
cuatro por ciento, casi dos puntos porcentuales menos que el pronóstico
anterior, en tanto Estados Unidos se expandiría un 1,3 por ciento, por debajo
de los dos puntos calculados antes, lo cual estremece la producción universal y
repercute en la oferta y la demanda.
En todo caso, según
entidades como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, de todos
modos el crecimiento global se ralentecerá por los efectos del Covid-19 en las
cadenas mundiales de producción y, por extensión, en la distribución y el consumo.
El Banco Asiático de
Desarrollo, por su parte, pronostica que, de continuar al actual ritmo la
propagación de la enfermedad, la economía global perderá unos 347 mil millones
de dólares, equivalentes a entre una y cuatro décimas del PIB global.
Las bolsas del
Sudeste asiático, por cierto, se desploman por estos días de forma vertiginosa
igual que en otras regiones del mundo, incluidas Wall Street, Europa y América
Latina, ante el impacto del COVID-19, mientras expertos en el tema ubican ya
esta crisis bursátil entre las peores en la historia de la economía mundial.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)