
Me quedo con un pedacito de esta columna: “Progresamos. Pero falta mucho”.
Obviamente que es así…
Nos
falta mucho…
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Martes 23 de Diciembre de 2014
La
institucionalidad de Barranquilla
Por Jairo Parada
Cuando termina el año y se avecina un 2015
signado por decisiones colectivas en las elecciones locales y departamentales,
no sobra recordar algunos temas de reflexión en nuestra ciudad.
Cada año se va con nuestros logros y
experiencias dolorosas según los albures de la vida hayan decidido. En una
ciudad como la nuestra siempre se corre el riesgo de solo ver los logros, o
solo ver lo negativo.
La realidad muchas veces ni es blanca ni
oscura, puede ser gris también. En lo económico y lo material, la ciudad crece
y nos llena de optimismo. La idea del progreso nos entusiasma, aunque sabemos
los retos de un área metropolitana muy empobrecida, y un suroccidente y
suroriente muy empobrecidos. Mentalmente nos volvemos demasiado optimistas, o
también perdidamente pesimistas. Tal vez la realidad va por el medio.
La Encuesta de Percepción Ciudadana 2014,
recogida y procesada por Barranquilla cómo Vamos (BCV), excelente proyecto
ciudadano, no miente al respecto. Solo el 61% de los barranquilleros piensa que
las cosas van bien, aunque la mayoría es optimista. Un 30% se considera pobre y
muchos de estos no tienen las tres comidas. Aunque hemos avanzado en educación
y salud, sin duda, los problemas de calidad de estos servicios nos afectan,
generando inequidad y exclusión.
Un 30% de los ciudadanos piensa que la ciudad
es insegura. Para entender este fenómeno, no basta quedarse en los indicadores.
Hay que analizar trabajos como los de L.F. Trejos y A. Posada, “Paramilitarismo
en la ciudad de Barranquilla: Crimen organizado y mercados de violencia”
(revista Economía de El Caribe, Universidad del Norte, No.14, 2014), en el
cual, utilizando la hipótesis de la “reconfiguración cooptada”, podemos
asimilar lo que hoy vivimos, como resultado evolucionario del pasado. Sentirse
inseguros en los buses, barrios y espacios públicos deja mucho que desear.
En participación ciudadana los
barranquilleros nos rajamos totalmente.
Somos individualistas y nos limitamos a la
familia y amigos. Muy poco participamos en política, asociaciones de vecinos, y
ni a las asambleas de nuestros edificios vamos. Apenas las iglesias logran un
25% y las asociaciones deportivas un 6%. Lo demás da grima. La globalización
nos volvió solo consumidores individualizados y nada nos importa. Es una
situación a mejorar desde la sociedad civil y el Gobierno local. No todo es
pavimento y concreto. Los malos gobiernos pueden regresar si no mejoramos en
estas actividades, y ya hay amenazas sobre la Gobernación.
En cumplimiento de normas nos va mal, somos
pre-modernos. Apenas un 20% o 30% dice cumplirlas. Algunas dependencias del
Distrito salen bien evaluadas. Otras, como movilidad y seguridad, quedan muy
mal. Los indicadores sobre transparencia y corrupción son mediocres. Eso
debiera despertar a las ONG que se dedican a esto.
Las páginas web no
garantizan la transparencia de la contratación pública. Es la democratización
de la contratación lo que es relevante, y de eso muy poco vemos. Concesiones
hay que revisar. Progresamos. Pero falta mucho.
@jparadacor--
Jairo Parada Corrales
Economista, Ph.D.
Barranquilla-Colombia
Tel 57-5-3557657
Economista, Ph.D.
Barranquilla-Colombia
Tel 57-5-3557657