Y se refirió a un tema que viene preocupando a los gobiernos de América Latina: el mandato Maduro.
Lo que está haciendo el mandatario en Venezuela está afectando las poblaciones cercanas.
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
El
presidente de Colombia, Iván Duque
pidió ante la ONU medidas globales ante migración y drogas
En su
primer discurso ante el organismo, el mandatario colombiano dijo que en dos
años llegaron un millón de venezolanos
Noelia
Cigüenza Riaño - nciguenza@larepublica.com.co
Frente a los ojos de los 133 mandatarios de los países que participan en la 73 Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, el jefe de Estado colombiano, Iván Duque, aprovechó su primer discurso ante el plenario mundial para pedir ayuda a la comunidad internacional con el objetivo de atender a la población migrante venezolana, derrotar el narcotráfico, fortalecer los mecanismos de sanción frente a la corrupción y sacar adelante el proceso de paz.
En sus palabras, que duraron exactamente 17 minutos, mostró empatía con los “hermanos venezolanos” que se están viendo obligados a cruzar la frontera debido a la “dictadura” del gobierno de Nicolás Maduro, pero no le tembló la voz al reclamar al conjunto de Estados del mundo la cooperación necesaria para ejercer todos los mecanismos que permitan generar una sanción por parte de la Corte Penal Internacional.

En concreto, celebró el nombramiento de Eduardo Stein Barillas como Representante Especial Conjunto para los Refugiados y Migrantes de Venezuela, pero recordó que estas medidas deberían estar acompañadas por la creación de un Fondo Multilateral que se encargue de atender a la población migrante.
LOS
CONTRASTES

“En su primer discurso, el presidente planteó que el Gobierno de Nicolás Maduro sea denunciado e investigado por parte de la Corte Penal Internacional”.
En su
primera intervención en la ONU, Duque también pidió medidas globales para
combatir el flagelo del narcotráfico, pues aunque su Gobierno ya se ha
comprometido a desarticular las redes del crimen trasnacional con una agenda
integral, recordó que esta problemática requiere del esfuerzo de todos.
“El
narcotráfico es una amenaza global. Ya estamos tomando medidas. Hace dos días,
apoyamos el llamado global a la Acción contra el Problema de las Drogas,
reconociendo que el trabajo es de todos y requiere que todos los países
contribuyan, incluyendo aquellos donde el consumo crece o los que son
fabricantes de precursores químicos”, sentenció el jefe de Estado.

En
materia de cultivos ilícitos, indicó que hace pocas semanas el país recibió una
situación alarmante pues en el informe de la Oficina de Naciones Unidas contra
la Droga y el Delito (Unodc, por sus siglas en inglés) se comprobó como el año
pasado registraron un incremento de 17% frente a 2016. “La tendencia
incremental de los últimos cinco años no puede continuar, ya que estas siembras
se han convertido en el combustible y el aliciente para que surjan peligrosos
grupos armados organizados”, afirmó.
Ligado a
estos últimos comentarios, el presidente número 60 de Colombia advirtió que si
el país quiere la tan anhelada paz, será necesario “derrotar” el narcotráfico.
Además, siguiendo con el tema de los acuerdos de paz entre el Gobierno y las
Farc, fue contundente al criticar que recibió un proceso “frágil” en varios
frentes de su antecesor, el expresidente y Nobel de la Paz Juan Manuel Santos.
“Primero
está la fragilidad presupuestal: se realizaron muchos compromisos sin destinar
suficientes recursos. Y segundo la fragilidad institucional: se creó una
dispersa y compleja arquitectura que ha sido hasta ahora incapaz de avanzar
eficientemente hacia los objetivos”, esclareció Duque.
Es por
esto mismo que al igual que ya lo hizo Santos en ocasiones pasadas, le pidió a
la comunidad internacional su apoyo financiero para poder dar la solidez
necesaria al proceso de paz.
Eso sí,
aunque reveló que su Gobierno trabajará por la paz, fue vehemente al decir que
no aceptará que exista ni repetición ni más violencia, algo que para el
analista político de la Universidad Externado de Colombia, Carlos Arias, dejó
una vez más en el limbo el escenario de la paz desde una dinámica políticamente
correcta.
“Expuso
como bandera de su Gobierno un discurso anticorrupción que era de la sociedad
civil. Además, habló sobre la importancia de la paz pero no dijo ni cómo ni
cuándo se llevará a cabo y, adicionalmente, antepuso el tema de la no impunidad
al de la paz”, opinó.
En
concreto, las palabras de Duque ante el organismo multilateral fueron que el
Gobierno trabajará para que el proceso de desmovilización, desarme y
reinserción salga adelante con éxito. No obstante, cerró ese eje de su discurso
diciendo: “también es nuestro deber aplicar la ley de manera ejemplarizante a
quienes persistan en la criminalidad. (…) No vamos a aceptar que exista
repetición y más violencia. Quienes sigan en el mundo del delito y pretendan
burlarse de las víctimas y la generosidad del pueblo recibirán todo el peso de
la Justicia”.