jueves, 7 de mayo de 2020

La OIT reclama que los Estados garanticen el acceso de los trabajadores informales a los servicios sanitarios y brinden apoyo a los más afectados

El coronavirus nos ha demostrado que somos muy débiles. 

Que no aguantamos un vendaval. 

Que somos frágiles.

Un informe que empezó a circular en la mayoría de los países, preparado por los expertos de la OIT, la Organización Internacional del Trabajo, señala que los trabajadores informales deben ser protegidos por los Estados.

Y nos entregan datos que asustan.

De los 158 millones de trabajadores informales que hay en América Latina, el 90% podría caer en pobreza relativa por la crisis del coronavirus.

Quedó algo pendiente de ese estudio a la OIT: Qué porcentaje de trabajadores de la economía formal podrían verse obligados a pasar a la informalidad a consecuencia de la pérdida de empleos.

Vamos a leer parte de esa historia de la Organización Internacional del Trabajo.

RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
La OIT reclama que los Estados garanticen el acceso de los trabajadores informales a los servicios sanitarios y brinden apoyo a los más afectados


Un 90% de los trabajadores informales en Latinoamérica (140 de 158 millones) podría estar en situación de pobreza relativa a causa de la crisis de la COVID-19, es decir, percibir menos del 50 % de los ingresos medios nacionales, alerta este jueves la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Un informe del organismo que analiza el impacto de la crisis sanitaria en la economía informal mundial (aquella fuera del control estatal y no fiscalizada) muestra a Latinoamérica, donde un 53 % de sus trabajadores dependen de este tipo de empleos, como una de las regiones más perjudicadas. "América Latina es una de las regiones más vulnerables a la crisis por la alta tasa de empleados informales ", destacó la experta de la OIT.

Elva Mourelo, quien subrayó que la importante presencia en ese tipo de trabajos de mujeres y pueblos indígenas les pone en especial riesgo. En un momento de masivos confinamientos sanitarios en todo el planeta muchos vendedores ambulantes, empleados domésticos, taxistas por cuenta propia y otros trabajadores del sector informal han perdido todos o buena parte de sus medios de sustento, lo que según la OIT afecta a 1.600 de los 2.000 millones de personas con este tipo de empleos en el mundo.
Según la organización, la pobreza relativa en este tipo de trabajadores podría crecer con la crisis del 36 % al 90 % en Latinoamérica (los mencionados 140 millones de personas), del 17 % al 77 % en Norteamérica (147 millones) y del 34 % al 80 % en Europa y Asia Central (80 millones).

En África el porcentaje de trabajadores informales en pobreza relativa podría pasar del 20 % al 83 %, lo que supondría 324 millones de personas, y en Asia-Pacífico el ascenso sería menor que en otras zonas, del 21 % al 36 %, aunque dada su mayor población significaría 488 millones de empleados afectados.

A nivel global supondría aumentar en más del doble el porcentaje de trabajadores informales viviendo en situación de pobreza relativa, del 25 % al 59 % (1.180 millones de personas). Entre los principales afectados por la actual situación se encuentran personas que trabajan en servicios de hostelería, industria, comercio, y más de 500 millones de trabajadores del campo, señala el informe.


"Muchos afrontan un dilema irresoluble, el de morir de hambre o morir por el virus", subrayaron los expertos de la OIT en la presentación del informe. "La crisis de la COVID-19 está exacerbando debilidades y desigualdades que ya existían", subrayó Philippe Mercadent, jefe de mercados laborales inclusivos de la OIT, quien pidió la puesta en marcha de políticas que apoyen a trabajadores y pequeñas empresas afectadas por la situación actual.


La OIT reclama en ese sentido que los Estados garanticen el acceso de los trabajadores informales a los servicios sanitarios y brinden apoyo financiero y alimentario a los más afectados.

El estudio subraya que debido a la necesidad de muchos trabajadores informales de seguir trabajando para alimentar sus familias, algunos países no pueden poner en práctica las medidas de confinamiento y distanciamiento necesarias para frenar la COVID-19, lo que "puede convertirse en un foco de tensión social".


La OIT no estudió en esta investigación qué porcentaje de trabajadores de la economía formal podrían verse obligados a pasar a la informalidad a consecuencia de la pérdida de empleos, aunque sus especialistas anticiparon que se producirán flujos en esa dirección que aumentarán el tamaño del sector informal global.


Precios del petróleo rebotan con fuerza Este jueves China informó de un gran aumento de sus exportaciones.

El Covid-19 es el que manda la parada en este momento.

El precio del petróleo era antes el que movía mucho la economía mundial. Y seguirá siendo así, una vez el virus se controle.

En enero el precio del petróleo era de 65 dólares.

En febrero 55.

Bajó a marzo a 34.

Y en abril 18, aproximadamente…

Este, mayo, empezó a subir.

Los datos de hoy en Colombia: el petróleo intermedio de Texas (WTI) operaba este jueves con una importante subida del 5,21%, hasta los 25.24 dólares el barril, mientras que la referencia Brent en Londres gana 2.32% a 30.41 dólares.

Es bueno estar atentos.

El coronavirus, cambió la película.

RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1 
Precios del petróleo rebotan con fuerza
Este jueves China informó de un gran aumento de sus exportaciones.

La valor del petróleo vuelve a subir este jueves por un fuerte aumento de las exportaciones por parte de China y con la esperanza de que las reaperturas económicas sirvan para que se produzca un repunte en la demanda, fuertemente golpeada por la pandemia del COVID-19.

A las 11:40 de la mañana hora de Colombia, el precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) operaba este jueves con una importante subida del 5,21%, hasta los 25.24 dólares el barril, mientras que la referencia Brent en Londres gana 2.32% a 30.41 dólares.

Los precios del 'oro negro' continúan en la senda de la recuperación tras dejar atrás lo que los analistas denominan 'mercado de contango', que se refiere a la práctica de algunos productores de retener el crudo con la intención de venderlo cuando los precios sean más altos, lo que sumado a las reaperturas económicas y a la desaceleración de la producción en Estados Unidos se ha traducido en un auge en los precios.

También han influido el crecimiento de la demanda de gasolina en Estados Unidos, el descenso de las exportaciones de Arabia Saudí y la aparente calma en los mercados bursátiles alrededor del mundo mientras se produce la vuelta gradual a la normalidad en parte de Europa y algunos estados de Estados Unidos.

El analista jefe de mercados petroleros de la consultora Rystad Energy, Bjornar Tonhaugen, analista de mercados petroleros, señaló que en lo que queda de mes "no será inusual algunos cambios ligeros en los precios". 

"Los operadores serán optimistas con las noticias de nuevos cierres -de pozos-, aunque es de esperar, y los precios aumentarán con cada nuevo anuncio de reducciones de producción. 

Es el viejo arte del comercio", señaló Touhaugen.

El analista pronosticó un superávit de crudo de alrededor de 13 millones de barriles por día (bpd) para el mes de mayo que calificó de "significativo", aunque representa la mitad de lo registrado en abril.

En la última semana, la entrada en vigor del histórico ajuste de 9,7 millones de bpd de la Opep y sus socios, junto con los recortes llevados a cabo por países como Estados Unidos , cuyas principales petroleras -Exxon, Chevron y ConocoPhillips- han reducido su bombeo, ha servido para devolver cierto equilibrio a los mercados energéticos, que en abril llegaron a colapsar por la falta de espacio de almacenamiento y la escasa demanda.