domingo, 20 de octubre de 2024

"La descarbonización está en manos de los países ricos": Gustavo Petro en inauguración de COP16

 

Gustavo Petro, presidente de Colombia, durante instalación
de la COP16 en Cali, Colombia.
“Es fundamental hoy cambiar deuda por acción climática”, dijo el presidente de Colombia, Gustavo Petro, durante su discurso de inauguración de la COP16 (Conferencia de las Partes) que se celebra en Cali, Colombia.

El mandatario recalcó que no puede existir el riesgo como criterio de medida de la tasa de interés, ni así tasar los préstamos y por ello, rebajar el riesgo en la deuda del tercer mundo es hoy vital: “Si los fondos de capital y los fondos de pensiones de los países ricos cimentan su rentabilidad en las economías de los países pobres, dejarán a la humanidad sin los instrumentos para superar la crisis climática”.

Para el presidente colombiano, las economías riesgosas son las que pueden exterminar la vida hoy pues son las que más emiten CO2 a la atmósfera, son las economías fósiles petroleras, carboneras y gasíferas: Estados Unidos, China y Europa. Y por ello pregunta “¿Por qué cobran sobretasas a la tasa de interés a los países que aún hoy absorbemos como esponjas el CO2 de la atmósfera a través de nuestra selvas y bosques? ¿A través de nuestra biodiversidad? A través de la historia los países biodiversos hemos también acumulado las culturas de la humanidad”.

Petro considera que solo cambiando el riesgo país por acción climática, se podrá financiar el plan Marshall que detenga en el planeta la crisis climática, que descarbonice la totalidad de la economía: “Cobran una prima de riesgo a quienes absorben el CO2 que arrojan los mega ricos del planeta, eso es un verdadero contrasentido moral y mortal”, resaltó el presidente de Colombia.

En la parte final de su intervención, Gustavo Petro dijo que a quienes hay que cobrar los impuestos para eliminar el carbono de la producción y el consumo es a los más ricos depredadores: “Con los impuestos sobre la mega riqueza depredadora, con el cambio de la deuda por acción climática, pasamos a nuevos modos de producción, a un relacionamiento diferente entre los seres humanos frente a la producción y la riqueza.  A una manera diferente de concebir y experimentar la riqueza, que se basa ya no en las energías fósiles de la muerte, sino en las limpias que necesitan más del sentir que del tener. Mas de la acumulación de la cultura que de las cosas”.

Cuidar la vida es la razón de ser de la humanidad

El presidente Gustavo Petro expresó su preocupación por la responsabilidad que la humanidad tiene sobre la vida misma: "Es nuestra razón de ser humana cuidar la vida y no destruirla. Por ser la vida inteligente viva y no la inteligencia artificial muerta, tenemos que usar la energía inteligente para expandir la vida, no para recortarla".

A pesar de esa responsabilidad sobre el cuidado de la vida, “parece que hoy vamos contra nuestra propia razón de ser”, señaló Petro y ante la pregunta de ¿qué afecta mayormente la vida en el planeta?, dijo: “No tenemos que decir nada más que nosotros, la humanidad. Hoy aparece una realidad fantasmal y algo mentirosa, pareciera existir una humanidad contraria a la vida, mentirosa porque una humanidad contra la vida es también una humanidad contra la humanidad”.

Al referirse a la inteligencia artificial el presidente colombiano dijo que esta se expande sin regulación humana, sin una regulación construida pública, racional y colectivamente por todos los pueblos del mundo y usando energías sucias.

Agregó que “cuando la inteligencia artificial se articula al petróleo, el carbón y el gas, se articula al colapso climático y se construye el Armagedón. Desempleo en masa universal, ganancias sin recorderis históricos, destrucción del clima y separación del ser humano de la realidad constituyen los condimentos del final de la vida”.

En su concepto, la humanidad no es la culpable, sino los dueños de la inteligencia artificial, quienes desencadenan el colapso climático, los ricos poderosos dueños de redes y de inteligencia sin vida, que sueñan con escaparse a Marte, mientras dejan sus culpas en la tierra destruida.

“La riqueza del mundo hoy se ha concentrado en el 1% de la población del planeta. La riqueza del mundo se mide hoy en dólares y en CO2 equivalente. Dólares y CO2 equivalente se han vuelto sinónimos desde hace dos siglos”, recalcó el presidente Gustavo Petro, quien agregó que “entre más rico es un ser humano, o una sociedad, en medio de nuestro actual modo de producir, más CO2 arroja a la atmósfera, más la ensucia, porque más carbono consume. El modo de producción de hoy es uno de consumo cada vez más grande de carbono y de expulsión cada vez mayor de CO2: el gas del calentamiento mundial”.

¡SOS por el SGP!

Amylkar Acosta, exministro de Minas y Energía de Colombia
Por: Amylkar D. Acosta M

Como es bien sabido hizo tránsito, de la anterior legislatura de las sesiones del Congreso de la República a la actual, el proyecto de acto legislativo 018 de 2024 Senado y 437 Cámara, reformatorio de los artículos 356 y 357 de la Constitución Política, concerniente al Sistema General de Participaciones (SGP), el cual constituye una bolsa de recursos que le transfiere la Nación a la entidades territoriales, los cuales fueron objeto de dos enmiendas, el Acto legislativo 01 de 2001 y 04 de 2007, en desmedro del mismo.

Como se recordará, so pretexto de las dificultades por las que atravesaba el fisco nacional se truncó el crecimiento de dichas transferencias, atadas como estaban al comportamiento de los Ingresos Corrientes de la Nación (ICN) y se optó por desligarlas, supuestamente de manera transitoria, de los mismos. Pero, en este país no hay nada más permanente que las normas transitorias. La meta a la que debía conducir la senda de incremento anual de los recursos del SGP debía alcanzar con el paso de los años el 46.5% de los ICN, más el año anterior a duras penas llegó al 21.3%.

En plata blanca, entre los años 2002 y 2023, por cuenta de tan nefastas reformas los departamentos, distritos y municipios del país dejaron de recibir la friolera de $388 billones, recursos estos que al tener como destinación específica la salud, la educación y el saneamiento básico, el financiamiento de estos quedó diezmado en detrimento de la calidad de vida en las regiones.

Ello se vio agravado porque concomitantemente con  la recentralización de los recursos que ha experimentado el país en el curso de los 33 años de vigencia de la nueva Constitución Política, a contrapelo de su espíritu descentralizador y autonomista, se le delegaron a las entidades territoriales funciones y competencias desde el nivel central, pero sin recursos, violando lo establecido en el artículo 356 de la Carta, el cual establece claramente que no se les pueden hacer esas delegaciones si al mismo tiempo no se le garantizan los recursos necesarios y suficientes para asumirlas.

Con este proyecto, entonces, se busca por parte de las regiones resarcirse de la lesión enorme que le significaron los recortes de las transferencias que se derivaron de esos funestos actos legislativos. Dicho de otra manera, se trata de restablecer la senda perdida de crecimiento de sus recursos, de tal manera que entre los años 2027 y 2036, escalonadamente, se llegue al 46.5% de los ICN, como lo previó la Asamblea Nacional Constituyente de 1991.

Ante tan justo reclamo, el Presidente de la República Gustavo Petro le dio su espaldarazo a este proyecto de origen parlamentario, liderado por el Senador Guido Echeverri y ello le dio el impulso que le faltaba para su aprobación en primera vuelta. Además, se ha comprometido con la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación, FECODE, a respaldar e impulsar este proyecto. Por su parte el Ministro del Interior Juan Fernando Cristo, que desde la llanura auspició e impulsó esta iniciativa, al momento de asumir la cartera y anunciar los proyectos prioritarios para el Gobierno para su trámite en la presente legislatura destacó este, tan caro a sus afectos.

Los primeros en reaccionar y en hacerle reparos a este proyecto fueron el Centro de Estudios Económicos ANIF y el Comité independiente de la Regla Fiscal (CIRF). En concepto del Presidente de ANIF José Ignacio López, “de aprobarse este proyecto, las transferencias territoriales irían ganando participación hasta el punto que el 83%  de los ingresos del Gobierno Nacional en 2036 estaría comprometido en tres rubros: pensiones, intereses y transferencias al SGP”. Por su parte la CIRF aduce que, de aprobarse este proyecto, se “elevaría el déficit fiscal del 5% al 10% del PIB”, al tiempo que elevaría aún más la inflexibilidad del Presupuesto que hoy supera el 85%.

Pero lo que pierden de vista tanto ANIF como CIRF es que tanto los ICN, como lastre del elevado déficit fiscal que viene arrastrando el Gobierno Central secularmente, obedecen al complaciente régimen tributario que rige en Colombia, en el que abundan las gabelas, erosionando la base impositiva, hasta convertirla en una especie de queso gruyere, amén de la afectación del recaudo de impuestos a consecuencia de la evasión y la elusión del pago de impuestos, dada la laxitud de las normas.

Según el Marco Fiscal de mediano plazo (MFMP) de 2018, expedido por el Ministerio de Hacienda, el inventario de las exclusiones, exenciones, deducciones y descuentos tributarios en vigor para esa fecha eran 229 y el costo de las mismas ascendían a los $60 billones. Entre tanto, según la DIAN, para el año 2022, el monto de la evasión y la elusión tributaria ascendió a los $80 billones. Según el Centro de Investigación Económica y Social Fedesarrollo, en promedio, ambas cifras, se acercan a los 5.4 puntos porcentuales del PIB.

Dicho lo anterior, no salimos de nuestro asombro por el veto del Ministro de Hacienda Ricardo Bonilla, pues según él este proyecto “viola la Constitución y rompe la regla fiscal”, al tiempo que su subalterno, el Jefe de Crédito Público José Roberto Acosta se explayó diciendo que “transferir 9.2% del PIB en 2036 a municipios y departamentos para el período 2027 – 2036, sin que se definan competencias y destino de esos dineros viola el artículo 334 de la Constitución y materializa una federalización a las malas”. Cabe preguntarse desde cuándo una reforma a la Constitución es inconstitucional. La reacción desde las regiones no se ha hecho esperar, el Referendo por la Autonomía fiscal de las regiones ha cobrado vuelo y ya el número de firmas superó el millón. El Presidente Petro y el Ministro Cristo tienen la palabra!