DIOS lo tenga en su gloria.
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1


Pd: su penultima columna en El Heraldo.
LuisE
De golpe... ¡sí, ala! Por: Fernando Arteta
Fernando Arteta no está de
acuerdo…
Vamos a leerlo.
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1

De golpe... ¡sí,
ala!
Por: Fernando
Arteta
Término medio cachaco usado
para convencer a alguien de algo que no está claro o no se entiende o no se acepta.
Usualmente, la expresión, que puede tomarse como una afirmación, es en realidad
una forma de ordenar o dar una instrucción a un subordinado, empleado o
dependiente de quien la lanza.
Debemos estar seguros de que el
ejecutor del mandato no ha podido superar las etapas previas al
condicionamiento racional por medio del cual, con argumentos y razones, hubiese
podido obtenerse, de manera general y sin presiones, el visto bueno o la
aprobación de aquello que genera el disenso.
Nos encontramos envueltos en
Colombia en una situación que absorbe cualquier otro tema sin importar su
trascendencia. El acuerdo que busca la paz en el país ha sido tan buscado, tan
deseado pero a la vez tan infortunado, que los medios para obtenerlo parecieran
admitir cualquier cosa. Hago la aclaración que “cosa” significa lo que sea y no
encuentro un ejemplo más apropiado para el cuestionado dicho de que “el fin
justifica los medios”.
Temas como la grave situación
económica del país, la crisis de la justicia o la triste e infranqueable brecha
social, no parecen importarles a los cuatro o cinco grupos “empresariales” que
manejan al país eligiendo a los gobernantes ungidos por el “voto popular”, ni
mucho menos a esos ciudadanos de a pie que votan y eligen a quienes saben que
son los causantes de casi todo lo malo y lo bueno que nos pasa.
Por el Sí o por el No se
enfrentan Santos con Uribe, el contralor con Gina, Benedetti ataca a María Fda
y Pepe Félix, Roy Barreras pelea con el que sea, todos en un afán personal –que
todos niegan– de aprovechar el río revuelto para ver si los bocachicos se
vuelven salmones canadienses o al menos truchas arco iris boyacacunas.
No entiendo cómo el martes
pasado se desarrolló un debate en plenaria del Congreso, que contó con una de
la mayores asistencias de los últimos años, congresistas y barras hasta en la
Plaza de Bolívar, con pantalla incluida. Cerca de 2.000 personas seguían a los
padres de la Patria interesados en ejercer control político a una alta
funcionaria estatal por unas cartillas que aparentemente circulaban, o no,
entre las directivas de varias instituciones educativas del país.
El debate del martes mostró lo
avanzado de nuestra sociedad, con hasta reconocimientos personales acerca de la
identidad –tendencia o ¿será preferencia?– de género de una ministra y
parientes de congresistas, pero sin llegar a ninguna parte. El tema importante
se diluye como el agua entre los dedos ante la ausencia de un líder que, con
razones, sin subjetividades ni amenazas, oriente al país para la toma de una
decisión que por lo simple y chiquitica, no deja de ser la más importante que
tomemos los colombianos en los últimos 50 años.
Por donde empecé, no somos
todos ni subordinados ni empleados, ni dependientes. Por eso, ante la ausencia
de razones y de cara a una cantidad apreciable de propuestas que no convencen,
es también válido y además totalmente lícito, justo y razonable y no por
caprichito, decir: ¡carajo... No!
fernandoarteta@gmail.com