Esta
semana, el funcionario lo ratificó en sus intervenciones en la capital. Habló
con la prensa extensamente.
Obviamente,
se refirió al proceso de paz. Confía mucho en lo que está ocurriendo y seguirá
ocurriendo en la nación en torno al tema y otros más…
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Vicepresidente Óscar Naranjo y Rodolfo Anaya, vicepresidente de Promigas
Naranjo
invitó a los empresarios a estudiar el mapa de oportunidades de un país sin
confrontación armada donde hay 14 millones de clientes potenciales.
Katherine Benítez Piñeros -
abenitez@larepublica.com.co
En el
marco del Foro Casos y Resultados Empresariales del Caribe, el vicepresidente
de la República, Óscar Naranjo, destacó el buen momento que vive la capital del
Atlántico. “No hay una ciudad en el Caribe más próspera y llamada a generar
riqueza, negocios y conectividad que Barranquilla”, afirmó Naranjo.
De hecho,
el vicepresidente no dudó en señalar que a su arribo a Barranquilla “encontró
una ciudad pujante, moderna, transformándose y ampliándose al punto en que hoy
quiero decir que Barranquilla no es la capital del Caribe colombiano, es la
capital internacional del Caribe”, por lo que invitó a los empresarios a seguir
transformando la realidad del país a través de sus logros.
Una de
las razones para hacerlo, según Naranjo, es que “llegó la hora de la generación
de riqueza sin la amenaza de la muerte rondando a cada colombiano”. Esto en
referencia a que con el fin del conflicto con las Farc, el Gobierno espera que
siga disminuyendo el número de muertos (a final del año la cifra podría estar
en 11.000).
Así
mismo, el vicepresidente contó que uno de los retos que tiene el Estado es tener
la capacidad para llegar a un territorio de manera permanente e integral y no
en un lógica contrainsurgente y esporádica como lo fue durante el conflicto. De
esta manera, se podrían cerrar las brechas entre esa Colombia profunda y rural,
con la de la ciudad, por lo que invitó al empresariado a formar parte de ello.
“Los
empresarios hoy no solo deberían preocuparse por satisfacer la oferta de bienes
y servicios en los centros urbanos, sino también en cómo llegar a esas 14
millones de personas que hacen parte de zonas donde la violencia no les
permitió tener acceso a derechos, bienes y servicios”, relató Naranjo.
Incluso,
contó que a partir de los mapas del posconflicto, en cerca de 170 municipios
pueden haber oportunidades de negocio. “Es un imperativo ético llegar a esos
territorios, con una oferta suficiente de bienes y servicios”, destacó.
En ese
sentido, también hizo la invitación al empresariado de estudiar “el mapa de
oportunidades que nos ofrece un país sin confrontación armada donde hay 14
millones de clientes potenciales”, reiteró el vicepresidente.
En sus
reuniones con líderes sociales de estos territorios, un denominador común fue
que le dijeran: “muy bien que llegue el Estado, la seguridad y la justicia,
pero ¿dónde está la empresa privada para que nos ofrezca oportunidades de
vinculación, asociación y emprendimiento?”
Para
el vicepresidente, la empresa privada tiene la habilidad para llegar y transformar dichos
territorios, así como lo ha hecho con la ciudad, puesto que las comunidades
están a la expectativa.
Destacó la importancia de los empresarios no solo para el desarrollo
del país sino también para dignificar la calidad de vida de los ciudadanos.
“Hoy en
Colombia hay cerca de 274 centros comerciales que cumplen con los estándares
internacionales. Estos permiten que al año transiten 800 millones de personas,
es decir que allí la población colombiana circula 20 veces al año”, explicó.
Por
último, Naranjo resaltó que llegó la hora de elevar la voz de los
emprendedores.
“Hoy el
mundo depende de los emprendedores, generadores de riqueza, trabajen en función
de lo que necesita un Estado social de derecho llamado a dignificar a la
ciudadanía. La misión empresarial no es solo una misión mecánica, sino también
es más espiritual que política que permita a la ciudadanía acceder a derechos y
también a bienes y servicios”.
El Caribe tiene 50 de las empresas más grandes
Durante
su intervención en el foro, el superintendente de Sociedades, Francisco Reyes,
contó que de las 1.000 empresas más grandes del país con base en sus ingresos
operacionales, 50 tienen como domicilio la región Caribe. De esas empresas, 48
son vigiladas por la Supersociedades, una (Avianca) cotiza en Bolsa y una
cooperativa lechera del Atlántico la inspecciona la Superintendencia de Economía
Solidaria. En los primeros lugares están, respectivamente, Avianca,
Supertiendas Olímpica y Prodeco.
Sin
embargo, Reyes contó que el Caribe, al tener 5% de las empresas más grandes del
país, “sigue teniendo una cifra no tan significativa en comparación con otras
regiones. Pues, la gran mayoría están en Bogotá y Cundinamarca (60%) y
Antioquia con 17%”.
Así
mismo, señaló que durante 2016, los ingresos operacionales de la región
aumentaron en 11,74%, los cuales se explican por el repunte en el sector de minería
e hidrocarburos. “Incluso si se excluye Avianca y esos dos sectores, todavía se
ve una rentabilidad del patrimonio de 9%”.
Concluyó
con que 73 pequeñas y medianas empresas ubicadas en esta zona también hacen
parte de la lista.
“La competencia permite reinventarse”
El
superintendente de Industria y Comercio, Pablo Felipe Robledo, hizo énfasis en
la importancia de la competencia como garantía de una economía de libre
mercado.
“Los
empresarios tienen que darle gracias a la competencia porque les permite reinventarse.
El estado colombiano necesita que los empresarios no duerman tranquilos”, dijo
el directivo. En ese sentido, no dudó en afirmar que los carteles, aunque no
son ilegales, son “tristes” por su efecto en la economía.
“Si entre
todos controlamos nuestro desempeño puede que seamos más ricos, pero somos
menos empresarios, porque dejamos de competir y de ser rivales y pasamos a ser
compinches”, destacó Robledo.
Igualmente
recordó la importancia de la clase empresarial para la economía del país. “El
PIB es de $900 billones, las compras públicas suma 15% o 16% (es decir $150
billones). El principal actor como sujeto es el Estado, pero es minoritario.
Luego, el desarrollo empresarial es el motor de la economía”, afirmó.
Desde su
perspectiva, la principal premisa para lograr el éxito empresarial es
“competir, competir y competir”, de tal manera que se garantice el bienestar de
los consumidores.