Sin embargo, hay mucho más por considerar. Aquí puedes conocer más trucos para mantenerte en forma y no volver atrás.
1. La motivación es lo principal
Sí, para mantenerse en forma— y básicamente para lograr cualquier meta— es necesario tener motivación. Sin embargo, revisa bien qué es lo que te está motivando.
Muchas veces, la motivación principal de alguien cuando quiere bajar de peso y empezar a ser saludable es de carácter netamente estético. Es decir, muchas personas se plantean bajar de peso para conseguir la aprobación de otros, conseguir pareja o simplemente verse como las chicas de pasarela.
Este es un fatal error, pues realmente no lograrás cambios o mejoras definitivas. Cuando alcances ese objetivo “principal” que te habías planteado, es muy probable que dejes de hacer lo que hiciste durante un tiempo.
La mejor motivación es hacer un compromiso con tu salud y plantearte un mejor estilo de vida. De esta forma trabajarás por una meta a largo plazo y te sentirás genuinamente bien.
2. Elige una dieta que se adapte a ti
Es muy común y nada nuevo que muchas personas intenten seguir alguna dieta promovida por alguna figura reconocida. Lo cierto es que la dieta que debes seguir se tiene que adaptar específicamente a ti.
Según tu perfil hormonal, tu genética y, por supuesto, tus objetivos finales, existen distintos métodos alimenticios que probar.
3. Involúcrate
Al haber elegido la dieta que mejor se acople a tus necesidades, debes realmente involucrarte con el estilo de vida que está eligiendo vivir.
4. Planifica tus comidas
Todo pinta hermoso hasta ahora, pero falta un elemento fundamental:
la planificación.
De esta forma evitarás la improvisación y comer cualquier otra cosa nada saludable. Además, ¡te ahorrarás mucho dinero al hacer compras!
5. Elimina la comida rápida de tu vida
Al inicio de cualquier dieta, llega la muy indeseada
ansiedad. De la nada, te provoca una hamburguesa de algún restaurante de comida rápida o una bolsa de frituras.
¡A estas tentaciones debes decirles no! Es difícil, evidentemente, pero nada imposible. Con procurar tener una
merienda saludable (como almendras, una ración de fruta o un batido natural) siempre contigo, evitarás consumir estas comidas tan dañinas para nuestro organismo.
6. Haz ejercicio frecuentemente
El ejercicio es vital, sobre todo en estos tiempos modernos en los que cada vez somos más sedentarios, lo cual tiene graves consecuencias en nuestra salud.
Hacer ejercicio, además de mantenerte bien físicamente, ayuda a mantener una salud mental más estable, evitar enfermedades, dormir bien y tener más energía.
No es necesario hacer ejercicio de alta intensidad o ser maratonista,
con caminar 30 minutos al día, hacer
yoga o cualquier otra actividad física con la que te sientas a gusto estará bien.
7. Visita regularmente a un médico
Es importante siempre comprobar tu estado de salud, especialmente si decides seguir alguna dieta.
Como se explicó anteriormente, cada organismo es único y lo que le funciona a una persona puede que no te funcione a ti. Además, es importante siempre constatar nuestra salud para prevenir cualquier enfermedad.
8. Consigue que alguien te acompañe en esa lucha
Por último— y no por eso menos importante— tener un compañero que esté contigo en tu nuevo estilo de vida saludable es una excelente forma de mantenerse motivado.
Al tener quien te acompañe y comparta contigo sus experiencias, todo se vuelve mucho más agradable y divertido. ¡Juntos es mejor!