Crónica de viaje del Carnaval presente en Corea, por Carla Celia

El Carnaval de Barranquilla presente en Corea…

Carla Celia, nos cuenta como le fue a nuestro país en esa nación con nuestro folclor.

Luisemilioradaconrado

 

Crónica de viaje del Carnaval presente en Corea

Tener la oportunidad de conocer –llevando el Carnaval de Barranquilla–a Corea, su capital Seúl y Yeosu, sede de la Feria Mundial de Océanos y Biodiversidad, es una experiencia indescriptible…

Una vez nos recogió Santiago Arrubla, primer secretario de la Embajada de Colombia en Corea, nos embarcamos en un bus los 24 integrantes del grupo de Carnaval que viajamos a representar a nuestro país por medio del Carnaval de Barranquilla en el país asiático.
En el mes de julio es tradicional que los monzones y  sus vientos hagan su ‘agosto’… nos recibió Seúl con una gran cantidad de lluvia y niebla, situación esta que aún hoy, tercer día en este país, no ha variado para nada.
Viajo con 24 integrantes de varios grupos y comparsas del Carnaval de Barranquilla, quienes bajo la dirección de Jorge Garizábalo, y con muchas ilusiones de representar muy bien a Colombia, aparecen soñolientos en el bus, luego del largo viaje de más de 24 horas, y rodeados además de 37 bultos de equipaje, entre los que se contaban todos los instrumentos musicales, tamboras, llamadores, flautas de millo y toneladas de telas de vestidos de cumbia, garabatos, marimondas, toritos, gorros de congo, sombreros vueltiaos, cayenas y corales.

Una vez instalados en el hotel y ya repuestos del largo viaje emprendimos una visita rápida a la ciudad, empezamos a familiarizarnos con el won, su moneda nacional; con las venias respetuosas que hacen los coreanos al saludar y al despedirse, con el inglés gutural y sui géneris que hablan algunos de ellos, con la elegancia de las coreanas, con el olor amargo que a veces se respira en el ambiente, producido quizá por la comida a base de muchos vegetales y especias y que, dicho sea de paso, debe ser muy saludable pues no vimos ningún coreano pasado de peso.
Nuestro primer ensayo fue en el Plaza Hotel, donde el grupo conocería al señor embajador de Colombia en Corea, Jaime Alberto Cabal, quien se dio a la tarea durante más de 6 meses, apoyado por su primer secretario Santiago Arrubla y su reducido grupo de colaboradores, de lograr su propósito de traer esta delegación de carnavaleros, pues tenía la absoluta convicción de que sería la mejor representación del país en estas tierras asiáticas. Las conversaciones y mails cruzados a las horas más inverosímiles, por la diferencia de 14 horas entre ambos países, entre Arrubla y Luz Alejandra Aguilar, nuestra diligente directora de eventos de la Fundación Carnaval de Barranquilla, dieron resultado, y la logística del largo viaje funcionaba a las mil maravillas.

Carla Celia con el embajador de Colombia en Corea, Jaime Cabal, y la reina del Carnaval, Andrea Jaramillo Char. 

Al día siguiente de nuestra llegada a Seúl, partimos en el tren bala hacia Yeosu, ciudad portuaria y costera situada a tres horas de recorrido, y donde llegaría la reina del Carnaval, Andrea Jaramillo, quien se nos unía a la delegación para presidir la muestra en Yeosu, sede de la Expo 2012.
La sorpresa que se lleva el visitante al encontrarse inicialmente con un gran complejo de modernos edificios, con más de 5.000 apartamentos completamente dotados y 3 enormes hoteles construidos en algo menos de 2 años, no deja de causar gran admiración puesto que fueron construidos y concebidos para este gran acontecimiento mundial, sin embargo, lo mejor estaba por verse. Luego de acomodar y desempacar toda la parafernalia que traíamos en los apartamentos asignados por la Embajada para nuestra acomodación, ingresamos a la Expo Yeosu 2012. Indescriptible la sensación de monumentalidad que se percibe en el lugar, la enorme bóveda que se extiende a lo largo del techo de ingreso a la feria es la pantalla de led más grande del mundo, todo esto rodeado de grandes pabellones de 104 países que tienen costas en todos los océanos del mundo y que se hacen presentes en este evento, apostándoles a los más altos estándares de diseño, iluminación, sonido y tecnología que llevan al visitante a hacer enormes y organizadas filas para poder ingresar a cada pabellón y admirar cada montaje, además de disfrutar de las comidas típicas de cada país, sus productos de exportación y, más que todo, sus avances en el tema de conservación de sus océanos,  costas y especies marinas.

Durante los tres meses que dura la Feria Mundial, se designa un día para cada uno de los 104 países participantes, el día señalado para Colombia era el domingo 8 de julio.
Nuestra primera presentación sería a las 10 a.m., en el City Hall, moderno teatro con toda la tecnología en sonido y luces disponible y con capacidad para 1000 espectadores. En el camerino reinaba un ambiente de expectativa, dentro de los corre-corre de última hora, de planchar los disfraces que con el largo viaje llegaron llenos de arrugas, revisar el maquillaje de los integrantes del grupo y disponer de manera organizada del vestuario, ya que cada integrante debería cambiarse al menos 4 veces a fin de poder mostrar con tan poca gente las principales expresiones de nuestro carnaval a un público expectante por conocer estos bailes y ritmos lejanos para ellos.
La noche anterior, durante el ensayo de sonido, costó bastante trabajo que los técnicos pudiesen darle un sonido adecuado al tambor, no percibíamos su dejo final. Al fin, luego de 3 horas, se cumplió a cabalidad el cometido, y quedaron afinados con el sonido todos estos instrumentos, desconocidos algunos en Corea.
Finalmente, y ante un teatro completamente lleno, donde quedaron más de 300 personas afuera sin poder entrar, se dio inicio al protocolo que todo acto diplomático con un embajador a bordo debe tener. Las palabras de nuestro embajador, Jaime Alberto Cabal, ampliamente aplaudidas y haciendo mucho énfasis en las relaciones de cordialidad entre ambos países, las cuales cumplen 50 años ininterrumpidos; los coreanos nunca olvidan el contingente de 5000 colombianos que hace 62 años se presentaron a luchar con ellos, contando con el apoyo de Colombia en esa ocasión histórica, y luego de los himnos de ambas naciones, ante la presencia del Comisionado coreano y un selecto grupo de representantes de varios países del mundo, se dio inicio a la presentación del Carnaval de Barranquilla.
La apertura del evento con más de 20 banderas de nuestro país crearon el clima adecuado para admirar lo que vendría después.  Mostrar en 45 minutos toda una expresión cultural del tamaño y grandeza de nuestro carnaval no era tarea fácil...

En un breve recorrido que se inició con la parte indígena y su lamento triste, representado en sus instrumentos de viento, seguido por la magia africana y sus tambores trepidantes, dando paso a uno de los momentos cumbres cuando las dos excelentes cantaoras que nos acompañaban, Lina Babilonia y Laurens Acosta, interpretaron Yo me llamo cumbia  y La pollera colorá, e hizo su aparición nuestra reina del Carnaval 2012, Andrea Jaramillo Char, bailando con grandeza y señorío, seguida por las parejas de baile del grupo, lo que desató una gran ovación del público asistente al espectáculo. No podía faltar igualmente el Garabato y la pelea de la muerte, histriónicamente interpretada por Luis Rivelino Soto; el mapalé, las marimondas, los congos y un soberbio bullerengue con nostalgia de cantos del Río Magdalena, finalizando con la emblemática canción Carnaval de Barranquilla, con la cual  desfiló todo el grupo, con la gran satisfacción y orgullo de ser colombianos y de poder mostrar ante el mundo este Patrimonio de la Humanidad, el Carnaval de Barranquilla.
Fue la primera de una serie de tres presentaciones que cumplimos en Corea, dos en la Expo Yeosu 2012 y la última en el Plaza Hotel de Seúl, ante más de 500 invitados de la Embajada de Colombia en Corea, en el festejo de su día nacional, ante representantes del cuerpo diplomático, autoridades de Corea y colombianos residentes en ese país, cumpliendo de esta manera con el propósito de situar el Carnaval de Barranquilla en el lugar de privilegio ante el mundo que le corresponde y dejando en alto el nombre de nuestro país con orgullo colombiano.

Por Carla Celia
Directora de la Fundación
Carnaval de Barranquilla