Hace un análisis de lo sucedió en la Universidad del Atlántico, donde los jóvenes estudiantes sacaron a los políticos del recinto.
Leyendo a Víctor entendemos mejor
a los estudiantes.
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
¿Estudiantes
‘saboteadores’?
Victor Herrera Michel Oct 25, 2017.
“Desadaptados”, “Vándalos” y
“Saboteadores” fueron algunos de los epítetos utilizados contra los estudiantes
que participaron en la movilización al interior de la Universidad del
Atlántico que terminó con el desalojo de los políticos citados para la
ceremonia de inicio formal de la denominada RAP, a la que, por cierto, ellos –
los alumnos – no fueron invitados.

Sin embargo, reflexionando sobre
el contexto de lo acontecido encontramos que realmente fue una imprudencia, por
decir lo menos, de quienes organizaron el evento allí. Pues los estudiantes –
no solo en esa universidad si no en otras en la ciudad y el país – habían
estado protestando desde hacía varios días porque consideraban que el
Presupuesto General de la Nación, que se discutía precisamente en el Congreso
de la República, atentaba mortalmente contra la subsistencia de la educación
pública superior. Y, justamente, apenas unas horas después de aprobado definitivamente
ese presupuesto que les afecta, trataron de imponerles la presencia en su
recinto académico de gran parte de los parlamentarios que lo ratificaron –
representados en la denominada “Bancada Costeña” y en los miembros de la
Comisión de Ordenamiento Territorial del Senado – lo cual era algo más que una
afrenta, casi una provocación. Un viejo refrán enseña que “En casa del
ahorcado… no se menciona la Soga”, pero es que en esto fueron más allá: les
llevaron a su casa a los verdugos, justo el día del sepelio…!!

También creemos que es necesario
rescatar de esa actitud de los estudiantes dos factores importantes: Primero:
que hayan sido jóvenes de la generación de los “millennials” (nacidos entre
1.980 y 2.000), tan concentrados en sí mismos y – como dice Antonio Avalón
en una columna reciente en el diario El País, de España – carentes de “civismo
y responsabilidad”, que “no se identifican con ninguna aspiración política o
social”, amén de su “falta de vinculación con el pasado y su indiferencia con el
mundo real”, los protagonistas de una protesta colectiva de varios
centenares de alumnos con los rostros descubiertos cantando: “... Allí están,
esos son los que venden la nación…” o gritando: “… Fuera Corruptos…” y tirando
bolsas de agua hasta conseguir sacar a los políticos del campus universitario,
nos recuerda con nostalgia las épocas de pasión y lucha de las famosas jornadas
de Francia del 68 (la misma época en que aquí participaron muchos de quienes
hoy critican) o las de la séptima papeleta, en la Colombia de los 80´s.

Y, segundo: Que los estudiantes
consideren su recinto académico como algo tan sagrado hasta el punto de
sentirse indignados por el ingreso de aquellos representantes de una clase
política que hoy se encuentra en su nivel más alto de corrupción y desprestigio
(cosa que creemos la mayoría de los colombianos, de acuerdo a las encuestas)
denota un sentido de pertenencia hacia su universidad no solo inusual sino
hasta cierto punto plausible.
Finalmente, dos temas más ha
desnudado este episodio: Los estudiantes no han olvidado del todo el suceso
político de la imposición de un rector diferente al que ellos habían elegido en
sus consultas internas (y que fue posesionado cuando ellos estaban de
vacaciones) que revive ahora al aproximarse la elección de representantes
académicos. Y, lo otro, la falta de socialización del asunto de Región entre
los estudiantes de la costa que conciben – como muchos ciudadanos de a pie –
que esto de la autonomía y de la RAP no es sino más de lo mismo pero con una
nueva fórmula. O como decían nuestros mayores: La misma lavativa pero con
diferente cánula…!!
@vherreram
No hay comentarios:
Publicar un comentario