Esta historia breve, se podría tomar
como una de las historias más crueles de este país, Colombia.
Cruel, si analizamos las consecuencias
finales del cuento.
Uno podría vivir sin preocuparse. Gozar, beber, tomar cerveza, incumplir las cuentas y esperar que a los 65 años y un poco más, si te va bien, el Alzheimer te consuma, y que tus hijas o hijos se encarguen de lo demás, pero no somos tan irresponsables y por eso nos preocupamos…
Siempre que se sacan las estadísticas, aparecen unos aventajados que tienen gran parte de la torta.
Como dije, la historia puede ser tomada como una de las más crueles…
Está aquí en el RADAR, por cuenta de los amigos de las Notas Confidenciales de J y Duglas…
RADAR,luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Informalidad e inestabilidad, lastre
pensional
Por Notas Confidenciales
Colombia tiene menos de dos millones de
pensionados; el
80% recibiendo apenas el salario mínimo
y una casta de
congresistas, exmagistrados y jubilados
de las Fuerzas
Militares que absorbe la mayor parte de
los recursos del sector
público.
En el foro sobre vejez, convocado en
Medellín por
Anif y Asofondos, los panelistas Sergio
Clavijo, Santiago
Montenegro, Miguel Largacha, Alejandro
Vera y Hernán Avendaño, reconocieron que el problema grave está en la
informalidad laboral del 63%, la inestabilidad del empleo formal que no tiene
contratos más allá de nueve meses, el bajo nivel educativo del 80% de los
trabajadores sin formación superior y el ingreso que para el 81% de los
afiliados está por debajo de dos salarios mínimos.
Por eso, en su estilo, dijeron que una
reforma pensional es urgente porque hay un rezago de 20 años y en ella algún
día deberá incluirse un aumento de la edad, ojalá igual para hombres y mujeres
a los 65 años, rebajar el monto de la pensión y elevar las cotizaciones que hoy
son del 16%.
Santiago Montenegro, presidente de
Asofondos, admite que “nos estamos envejeciendo con bajo nivel de ingreso”.
El país gasta más del 4% del PIB para
cubrir las pensiones
con un cheque que el año próximo pasará
de los
$40b. El problema está que ese dineral
apenas llega a dos
millones escasos de jubilados.
La expectativa de vida de 80 y más años
hace santiguar a los especialistas que no ven la forma de cuadrar las cuentas
con el actual esquema de aportes pensionales, sobre todo, porque en el régimen
de prima media no hay reservas.
Lo triste está en que de los cotizantes,
a duras penas el 25% se va a pensionar porque los demás no alcanzarán a aportar
el tiempo requerido.
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