Me ha gustado ser PERIODISTA
Por Luis Emilio Rada Conrado
Entré porque Barranquilla aún estaba atrasada.
Yo quería estudiar Ingeniería Civil, pero en ese
tiempo no había facultades disponibles.
Le aposté a comunicación, porque me gustaba eso
también. Yo lo tenía como un juego. Me organizaba. Ponía una mesa, un palito
(estilo micrófono) y me creía locutor… Era, para mí un hobby, un juego de niños…
Dije, voy a estudiar periodismo unos cuatro semestres en la Universidad Barranquilla, pero alguien me dijo: “No te metas ahí, porque es pirata”, y le hice caso a esa persona. “Ve a la Autónoma. Allí hay Comunicación Social y te preparas mejor. Y tomé la decisión de matricularme allí.
Como dije, lo hice por salir del paso, mientras
llegaba la Ingeniería…
Pero un día, Gilberto Marenco, compañero de curso de
bachillerato y después, colega en la facultad de Comunicación Social, me
comentó: “Estamos necesitando un compañero en RCN, en el noticiero, ¿por qué no
le apuestas a eso?
Y yo le dije: “No me interesa, tu sabes que yo quiero
estudiar ingeniería”.
Gilbert insistió y terminé haciéndole caso.
Me senté con el director del Noticiero, J Enrique
Ríos, y empecé.
J, salió. Salió Jaime Rueda, que trabajaba con
nosotros y también Gilbert.
Quedé solo y los directivos de RCN llamaron a Carlos
Piñeros, quien trabajaba en Diario del Caribe.
Carlos no hacía radio. Excelente periodista, pero de
radio nada.
Nos tocó duro, pero aprendimos más. Más rápido porque
me tocó improvisar mucho para mantener las emisiones diarias: Mañana, medio día
y tarde…
Salí de RCN porque, a pesar del “camello”, no me
quisieron aumentar el salario. Y me fui en diciembre.
Era el gobierno de López y el director de RCN se fue con el presidente para gira internacional y querían que yo espera para tomar la decisión de aumentar el sueldo y no acepté, sino que renuncié.
Ese fue el arranque…
Como papá tenía un granero en el Mercado Público de
Barranquilla, Depósito Magangué, me insistió en que trabajara con él, porque
entre otras cosas, yo siempre estaba en el negocio. Y me fui a trabajar con él.
Yo me pagué los semestres con lo que me ganaba en el almacén.
Terminé Comunicación y un día me llamó el director del noticiero de Caracol Barranquilla, porque le interesaba que trabajara con él. J, le había comentado de mí y me contactó. Terminé laborando con él y después volví al mercado porque papá, mi hermano Gerardo y yo nos asociamos y compramos otro almacén: Depósito Magangué 2. Y allí nos tocaba duro, pero se producía dinero.
De ese almacén, de Depósito Magangué 2, nació el
Informativo Económico de la Costa, que con el tiempo se llamaría Radar Económico
de la Costa. Y más tarde Radar Económico y al final: RadaR.
Solamente RADAR.
Hay muchos empresarios y amigos que simplemente me
dicen: RadaR.
Definitivamente me canta esta vaina.
Si me dieran la oportunidad de morir y volver a vivir
haría lo mismo.
Obviamente, con unos pequeños cambios…
®luisemilioradaconrado
@radareconomico1
Periodistas como tú, muy pocos así que rindo homenaje a esos amigos periodistas que siempre la sudan al máximo, pero más bacano contar con tu amistad, un abrazo y feliz día
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