Dios nos trató muy bien este año.
Siempre le he agradecido todo lo que nos ha dado. A mí, a mi familia, amigos y vecinos.
Nuevamente gracias Señor.
Terminaremos muy bien 2023...
Lerc Comunicación Ltda.
Luis Emilio Rada Conrado
®luisemilioradaconrado
Sueña, cree,
vive y lógralo
El destino es el rumbo de la voluntad bajo el libreto inolvidable del propósito revelado por la historia. El rol protagónico de la narrativa expuesta por cada capítulo de la vida nos convierte en diseñadores del devenir, relatores del pretérito y decisores del ahora. Sueña, cree, vive y lógralo. Por JULIO CÉSAR HENRÍQUEZ
El futuro nos visita una vez más, despidiendo al pasado en la casa del presente. Dragones anuncian desde el zodíaco, guerras, especulaciones, supersticiones, amenazas y dificultades tejiéndose en medio de la expectativa global. Este será un año de cambios. Inevitables, predecibles, sorprendentes, esperados e impetuosos.
Se estima que astronautas descenderán en el polo sur lunar demostrando un avance en la carrera cósmica sin precedentes. El turismo espacial le apunta a ir más allá de la luna anunciando paseos al planeta Marte. La inteligencia artificial continuará la ruta transformadora de la vida: El diálogo entre las personas y las máquinas imprimirá otra forma de interacción social.
Drones, robots humanoides, vacunas esperadas por décadas y el desarrollo científico acelerado, anuncian un año de transición para las páginas de un siglo que transita desbocado, intentando descifrar el infinito sin resolver problemas fundamentales: Pobreza, hambre, salud, educación, reducción de la desigualdad, trabajo digno, acceso al agua potable, seguridad, paz, justicia y desarrollo económico.
La democracia
junto a los derechos humanos, el Estado social de derecho y las relaciones
internacionales, serán los cuatro puntos cardinales que orientarán el mapa
geopolítico mundial. La pregunta obligada será: ¿Seguiremos hablando de la
misma situación y las soluciones serán la ficción en los discursos de nuestros
gobernantes?
Tal vez no
exista ni ficción ni realidad. Mucho menos un buen discurso, porque la crisis
de liderazgo convierte a los más destacados, en replicadores de estrategias
adaptadas a diagnósticos, ofreciendo pronósticos sin tratamientos efectivos.
Las ideas se han evaporado junto al mito o la certeza del calentamiento global.
Se niega o se defiende, pero nada se resuelve.
Terminar es
empezar cada vez que el ciclo del tiempo reinicia el conteo de los días. El
final es el principio en la dinámica de los acontecimientos. ¿Se pueden
modificar las circunstancias? ¿Serás capaz de resolver tus propios dilemas? Que
este no sea un simple año más. Se pueden traducir las ideas en realidades.
Empecemos por los principios. Los valores motivarán el bienestar anhelado por todos. La prosperidad es inevitable para quien provoca la superación.
El destino es el rumbo de la voluntad bajo el libreto inolvidable del propósito revelado por la historia. El rol protagónico de la narrativa expuesta por cada capítulo de la vida nos convierte en diseñadores del devenir, relatores del pretérito y decisores del ahora. Sueña, cree, vive y lógralo.
Este será nuestro año. ¡Feliz 2024!